Un trabajador “golondrina” oriundo de Santa Fe fue detenido hoy como principal sospechoso de la violación y femicidio de Brenda Arnoletto, la joven encontrada estrangulada ayer en la localidad cordobesa de Pozo del Molle, luego de autoincriminarse en el hecho, informaron fuentes judiciales.

“Me mandé un cagadón, si me tienen que linchar que me linchen”, admitió el hombre de 37 años cuando esta mediodía declaraba como testigo en la causa y de repente comenzó a incurrir en contradicciones, relató el fiscal de Villa María, René Bosio.

Bosio explicó que se llegó a este hombre porque varios testigos dijeron que no era del pueblo, que lo vieron en un horario posterior al hecho “muy nervioso y que quería irse”, y había manifestado en la terminal de ómnibus que había perdido un colectivo.

Una mujer aportó que debido a esta situación, el hombre le había preguntado a un camionero si lo podía llevar, a lo que el chofer accedió.

Después de tomarle declaración al camionero, el ahora sospechoso fue llevado a declarar pero en calidad de testigo.

“Yo personalmente, con mi secretario, le tomamos declaración y entró en una serie de contradicciones importantes y llegó un momento que tuve que cortar la declaración porque ya se estaba autoincriminando”, contó Bosio.

Según el fiscal, el changarín negaba haber estado en el pueblo cuando ocurrió el crimen y dijo que se había ido en el colectivo de las 22, pero cuando le dijeron que sabían que lo habían llevado en un camión, se empezó a poner nervioso.

“Entonces empezó a trastabillar y le dijimos que era contradictorio hasta que en un momento baja los ojos y dice ‘Bueno, me mandé un cagadón, si me tienen que linchar que linchen'”, señaló el fiscal, quien dijo que previamente el joven había reconocido haber visto a Brenda (24).

Entonces, Bosio ordenó que se suspendiera la declaración para que pudiera asignársele un abogado defensor y ordenó una serie de medidas, entre ellas el allanamiento del campo donde estaba viviendo, ya que obtuvo el dato de que había lavado su ropa allí.

El fiscal sostuvo que el detenido tiene antecedentes por delitos sexuales y que se está chequeando si actualmente estaba gozando de algún tipo de beneficio.

En las próximas horas, será llevado a Córdoba capital para que le hagan una extracción de sangre y una revisión exhaustiva para establecer si presenta arañazos u otro signo de defensa de la víctima.

De acuerdo a la autopsia que se realizó en las últimas horas, la joven fue violada vía vaginal y anal, estrangulada de manera muy violenta y presentaba lesiones, escoriaciones y traumatismos por los fuertes golpes que recibió.

“Evidentemente en todo momento trató de defenderse del ataque sexual” y “murió asfixiada por estrangulamiento”, explicó Bosio, que caratuló la causa como “abuso sexual y femicidio”.

El cuerpo semidesnudo de la joven fue encontrado en las primeras horas de ayer en una obra en construcción de Pozo del Molle, una localidad del departamento Rí­o Segundo, distante a unos 170 kilómetros de la capital cordobesa.

El horario del crimen aún no fue establecido, pero que la franja va desde las 23 del lunes -media hora después de salir de su casa a caminar- a las 5 de la madrugada del martes último.

El fiscal consideró “llamativo” que nadie haya visto ni escuchado nada, ya que la zona donde fue hallada la joven es de mucho movimiento, por lo que no descartó la posibilidad de que el ataque se haya cometido en otro lugar y luego el cuerpo fuera dejado allí­.

“Era una chica muy tranquila, de una familia de Testigos de Jehová”, sostuvo el fiscal, quien añadió que aparentemente tení­a una pareja de la misma comunidad religiosa y a la que veí­a poco porque vive en la ciudad de Rí­o Cuarto, a unos 167 kilómetros de distancia.

Ayer, tras difundirse la noticia del asesinato, los habitantes de Pozo del Molle se movilizaron vestidos de negro por las calles de esa localidad para pedir el esclarecimiento del hecho y se haga justicia por Brenda.