Imputan a dos policías por robar el arma con la que mataron a un efectivo

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La Justicia imputó a dos policías por robar la pistola con la que mataron a otro efectivo durante un tiroteo con delincuentes ocurrido en el barrio Nueva Córdoba en febrero último, cuando también murieron dos ladrones en un intercambio de casi un centenar de disparos, informaron fuentes judiciales.

Según lo ordenó el fiscal de la causa, Rubén Caro, un oficial principal y un cabo que llegaron en un móvil a la calle Rondeau 84 apenas finalizó el intercambio de disparos fueron imputados por los delitos de sustracción de objeto (arma) destinado a servir de prueba ante la autoridad correspondiente.

Se trata de un delito excarcelable, por lo que ambos agentes continuarán por el momento en libertad siempre y cuando no entorpezcan la investigación, indicaron los voceros.

Al mismo tiempo, ya se giraron los antecedentes al Tribunal de Conducta Policial para que queden de inmediato en situación pasiva mientras se ordena una investigación administrativa paralela.

El robo de esta pistola calibre 9 milímetros, que se le adjudicaba al delincuente Ricardo Serravalle, muerto durante el tiroteo, generó preocupación al fiscal Caro.

Es que un dato clave de la pesquisa consigna que Serravalle dejó gran cantidad de vainas servidas calibre 9 milímetros entre un ascensor y el lugar donde quedó su cadáver.

Sin embargo, para sorpresa de los investigadores, junto al cuerpo del delincuente sólo se halló la pistola calibre .22.
Ante esta sospecha, el fiscal trabajó durante los últimos días bajo un estricto hermetismo en busca de los responsables de este delito y fueron allanados los domicilios de los dos policías en actividad.

Fuentes de la pesquisa apuntaron que “los procedimientos se realizaron en búsqueda de la pistola que fue robada de la escena del crimen minutos después de la infernal balacera en la que hubo por lo menos noventa balazos cruzados entre ladrones y policías”.

El tiroteo dejó tres víctimas mortales: el policía Franco Ferraro (29) y los delincuentes Rolando Hidalgo (62) y Serravalle (53).

De acuerdo con la hipótesis principal, Serravalle bajó por el ascensor del departamento del 7 “A” hasta el hall del edificio de Rondeau 84 con dos pistolas.

Apenas se abrieron las puertas, disparó contra los policías apostados en ese lugar, momento en el que mató a Ferraro de dos balazos: uno que le ingresó por debajo de la axila y le perforó un pulmón, y otro que lo hirió en el muslo.

Serravalle alcanzó a recorrer algunos metros más hasta que fue alcanzado por varios balazos, la mayoría por la espalda.

La causa ya cuenta con tres detenidos: Miguel Ángel Mitre (67), su hermana Teresa Mitre (69) y Diego Tremarchi (32), el sobrino nieto de ambos.

En tanto, el Gobierno cordobés mantiene vigente la recompensa de 200.000 pesos para quien aporte datos sobre dos prófugos, identificados como Ariel Francisco Murúa Rodríguez (50) y Ariel Eduardo Gramajo (45).

En todos los casos están sindicados como participantes del robo de alrededor de 3,3 millones de pesos, cometido durante la madrugada del viernes 16 de febrero, cuando una banda irrumpió en un departamento para llevarse el dinero y otros objetos de valor.