El abogado de la familia Dalmasso está sorprendido con la imputación al viudo

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El abogado Diego Estévez, representante de la familia de Nora Dalmasso, quien fue encontrada asesinada en 2006 en su casa de un barrio privado de la ciudad cordobesa de Río Cuarto, se manifestó “muy sorprendido” por la imputación al viudo Marcelo Macarrón y en ese sentido consideró que “no hay elementos para sostener” la acusación.

“Aún no conozco la resolución (del fiscal Daniel Miralles), pero por lo que sé la imputación es como autor material, cuando en realidad está acreditado con solvencia que estaba en Punta del Este (Uruguay) cuando ocurrió el hecho. No hay elementos para sostener la imputación a Macarrón”, afirmó el letrado a Télam.

El fiscal de Cuarta Nominación de Río Cuarto ayer imputó a Macarrón (57) por el delito de “homicidio calificado por el vínculo”, lo citó a indagatoria para las 9.30 del lunes 28 de marzo y le fijó una fianza de 3 millones de pesos para que permanezca en libertad.

De acuerdo a lo que informaron fuentes judiciales, la imputación del fiscal Miralles, quien asumió hace un poco más de un mes en la causa, se basa en los estudios genéticos practicados en 2008 sobre muestras de semen extraídas del cuerpo de la víctima.

Los resultados arrojaron que el ADN pertenecía al linaje Macarrón, motivo por el cual se imputó en 2007 a Facundo (28), hijo del matrimonio y sobreseído en 2012.

Ahora, el fiscal se basa en esos mismos datos para imputar al viudo, a partir de una franja horaria en que supuestamente ocurrió el crimen y que hasta el momento Marcelo Macarrón no pudo acreditar que estuvo en un torneo de golf en Punta del Este .

“Es muy complicado y creo que imposible pensar en algunas hipótesis que por ahí se dijo, como el de la posibilidad de que Macarrón haya viajado desde Punta del Este a Río Cuarto para asesinar a su esposa. Es descabellado”, consideró Estévez.

“Estuvo en Punta del Este con diez o doce amigos que conozco, quienes acreditaron con solvencia su presencia en ese lugar. No hay registro de lo contrario. Pensar en la posibilidad de vuelos ilegales y en un viaje maratónico es imposible”, reafirmó el letrado.

Por otra parte, recordó que Macarrón mantuvo relaciones sexuales con su esposa antes de viajar y por eso están sus rastros genéticos en el cuerpo de Nora.

Con respecto a otra hipótesis que había sugerido Estévez al fiscal a los pocos días de tomar a su cargo la causa, el representante legal de María Delia Grassi, mamá de la víctima, dijo: “Esto no tiene nada que ver con la línea de investigación que yo le había manifestado. Yo me refería a otra persona, no a Macarrón”.

Asimismo, Estévez expresó su “preocupación” por el direccionamiento investigativo del fiscal Miralles y más aún porque dispuso el secreto de sumario, lo que implica que no van a poder tener acceso al expediente.

El 26 noviembre de 2006, la víctima fue encontrada estrangulada y semidesnuda en su casa del barrio residencial Villa Golf, en Río Cuarto, distante unos 225 kilómetros al sur de la ciudad de Córdoba.

A lo largo de la investigación se manejaron varias hipótesis: una apuntó a un crimen durante un juego erótico, otra a un estrangulamiento durante la consumación de una relación sexual y la tercera un homicidio cometido tras un abuso.

Los estudios forenses determinaron que la víctima, previo a su muerte, tuvo relaciones sexuales, aunque nunca se estableció si fueron consentidas o producto de una violación.

Durante el largo proceso de investigación, se sobreseyó a los tres únicos imputados como sospechosos de cometer el crimen, el primero de ellos Rafael Magnasco, quien se desempeñaba como asesor en el Gobierno de Córdoba.

Luego, en 2007, fue detenido e imputado por “violación seguida de muerte” Gastón Zárate (36), quien había trabajado en la casa de la familia Macarrón y fue conocido como “el perejil o perejilazo” por la falta de pruebas en su contra, que lo llevaron a ser sobreseído en 2012.

Facundo, hijo de Nora, también fue acusado el mismo año por “sospecha leve” por presunto “abuso sexual gravemente ultrajante y homicidio calificado por el vínculo”, a partir de un patrón genético encontrado en el lazo que se utilizó para asfixiarla.

Sin embargo, el joven fue sobreseído en octubre de 2012 por falta de pruebas.

En noviembre, surgieron nuevas pistas del caso en base a escuchas telefónicas realizadas en una investigación por amenazas contra un abogado de Córdoba capital.