Detenidos en Tres de Febrero denuncian que fueron víctimas de “gatillo fácil”

1225
Foto policial.

El abogado de dos jóvenes detenidos en la madrugada del sábado pasado en la localidad bonaerense de 3 de Febrero denunció hoy que efectivos de la Policía Federal persiguieron, hirieron y arrestaron a ambos después de disparar una treintena de balazos, supuestamente por evadir un control callejero.

El abogado Sebastián Rodríguez describió a DyN que ambos detenidos circulaban en la madrugada del sábado cuando efectivos de la Policía Federal, trabajando en la provincia de Buenos Aires, intentaron interceptarlos “con una camioneta sin luces”.

Los jóvenes intentaron escapar, pero allí se inició una persecución, esta vez sí con identificación policial, que terminó cuando el vehículo en el que se desplazaban fue chocado por móviles de las fuerzas de seguridad, que “dispararon más de 30 balazos, al menos 12 de frente y contra el parabrisas”.

Ambos jóvenes resultaron con heridas de bala, uno de ellos con una fractura expuesta en una pierna, por la que debió ser internado en el hospital Posadas, mientras que el otro permanece detenido en una comisaría de Villa Bosch.

En sus indagatorias, los dos reconocieron que llevaban “cinco gramos de cocaína” (que, no obstante, no fue recuperada), que habían consumido estupefacientes y que iban a “buscar a una pareja de amigos para ir a bailar”.

Durante la persecución, alcanzaron a pedir ayuda a un amigo, quien llegó al lugar de los hechos y trató de neutralizar la situación, pero también él fue detenido y de su automóvil fue secuestrada un arma, de la que es legítimo portador.

Sin embargo, según denunció Rodríguez, esa arma fue reprochada como delito a los dos detenidos, quienes quedaron imputados por “portación de arma de guerra, abuso de autoridad y resistencia a la autoridad”.

En la causa interviene la UFI número cinco de la localidad bonaerense de San Martín, pero el abogado Rodríguez le dio hoy intervención a la fiscalía especial contra la violencia institucional (PROCUVIN) para que evalúe si se trató de un nuevo caso de “gatillo fácil”.