El fallo del Tribunal de la Sala II de Tucumán recayó sobre Claudio Alejandro “Cococho” Argañaraz (37), quien fue hallado culpable del delito de “homicidio agravado” en perjuicio de Ulises Benjamín Amaya (4).
El cuerpo de la víctima fue encontrado el 8 de agosto de 201 colgado de un puente en inmediaciones de avenida de Circunvalación, en El Colmenar, de dicho municipio ubicado en el límite norte con la capital tucumana.
El fiscal de Cámara Daniel Marranzino, quien llevó adelante la investigación, había pedido la máxima pena para Argarañaz y consideró que se trató de “un hecho lamentable, doloroso y aberrante”.
“La condena es un acto de justicia”, señaló Marranzino al finalizar la audiencia virtual en la que se conoció el fallo y destacó que “tanto los trabajos periciales técnicos como los testimonios permitieron conformar un cuadro probatorio para demostrar que esta persona fue quien llevó a cabo este hecho”.
El debate estuvo a cargo los jueces Gustavo Romagnoli, Luis Morales Lezica y Eduardo Romero Lascano.
“El tribunal coincidió de manera unánime con el pedido de la Fiscalía de Cámara y dispuso la prisión perpetua ya que Argañaraz comprendía la criminalidad de sus actos y es penalmente responsable, como lo confirman los informes médicos”, agregó el fiscal.
Por su parte, Argañaraz, hermano del abuelastro del niño, quedó detenido poco después del hallazgo del cadáver a partir de la declaración de un testigo que aseguró haberlo visto junto a la víctima en el lugar de los hechos
