Alejandro Alberto Maciel, el tercer detenido por el crimen de la adolescente marplatense Lucía Pérez, se negó esta tarde a declarar ante la fiscal de la causa aunque sí aceptó someterse a una serie de peritajes científicos, informaron fuentes judiciales.

En tanto, los padres de la víctima Guillermo Pérez y Rosa Montero volvieron a reclamar hoy que los responsables de la captación, violación y asesinato de su hija “vayan de por vida” presos.

“Nosotros hemos perdido lo más sagrado de la vida”, dijeron en diálogo con América TV y aseguraron que “seguiremos luchando por Lucía”.

Asimismo, advirtieron por la falta de seguridad en zonas casi despobladas de playa Serena y barrio Alfar, en el extremo sur de Mar del Plata, cuando fuera de temporada se suelen realizar fiestas de música electrónica sin controles y señalaron que “eso es tierra de nadie”.

Maciel era buscado por la justicia ante la posibilidad de que haya colaborado en la limpieza y posterior traslado del cuerpo de la joven al centro de salud del barrio Playa Serena, añadieron los informantes.

Personal policial de la DDI Mar del Plata logró detenerlo cerca de la medianoche en el interior del hotel Central Park, ubicado en calle Acapulco, en Santa Clara del Mar, donde se había alojado horas antes.

Según las fuentes, el hombre no ejerció resistencia y quedó alojado en la Unidad Penal 44 de Batán, imputado por el delito de encubrimiento en el marco de la causa que investiga la violación seguida de muerte de la menor de edad en una vivienda del barrio Alfar.

La fiscal expresó el viernes que este hombre “no habría participado del acto de sometimiento y la muerte de la menor, sino en un encubrimiento posterior de los hechos y ayudó a borrar los rastros del delito”.

La tercera detención en la causa se produjo horas después de que decenas de personas marcharan en torno a la ruta 11, en la zona de playa Serena, para reclamar justicia por el crimen de la adolescente que murió al ser atacada sexualmente.

“Han destruido una familia y a muchos amigos”, reconoció el hermano de la joven, Matías Pérez, y aseguró que van a hacer más marchas para denunciar esta situación porque “esto no puede olvidarse en una semana”.

Los padres de la víctima revelaron ayer que por la mañana, antes de la marcha, fueron amenazados de muerte por dos jóvenes que potaban un arma y circulaban a bordo de una moto por el frente de la casa de la familia. Lucía Pérez falleció hace una semana luego de haber sido drogada y “sometida a una agresión sexual inhumana” con violación y empalamiento por al menos dos hombres.