La Justicia de la provincia de San Luis ratificó el procesamiento del ex intendente de la localidad puntana de La Calera Diego Lorenzetti, acusado de ser el autor intelectual del homicidio de su esposa, Romina Aguilar, ocurrido el 30 de enero de 2016 en la capital provincial.
La Cámara del Crimen 2 de la provincia de San Luis rechazó ayer el planteo del defensor del acusado, el abogado penalista Carlos Salomón, quien había pedido la nulidad de la declaración indagatoria de su cliente y había cuestionado la actuación policial.
“Se trata de un pronunciamiento arbitrario, porque no se relaciona con los hechos, la prueba y el derecho aplicable en el caso”, afirmó en un correo electrónico el letrado y agregó que “la Cámara no da repuesta a ninguno de los siete agravios concretamente precisados, no analiza la pertinencia del planteo de nulidad, lo rechaza sin fundamentos puntuales”.
La resolución de la Cámara del Crimen 2 coincidió así con el fiscal del caso, Fernando Rodríguez, quien se había opuesto a los argumentos de la defensa y a la liberación del imputado.
Lorenzetti continuará detenido en el penal local, donde se encuentra alojado desde el 1 de marzo último.
El ex intendente fue procesado con prisión el pasado 12 de marzo, acusado de ser el autor intelectual del homicidio de su mujer de 32 años, bajo la carátula de delito de homicidio calificado por el vínculo, por mediar promesa remuneratoria y por el uso de arma de fuego en calidad de autor intelectual.
Aguilar fue asesinada el 30 de enero de 2016, a las 7, en la ciudad de San Luis, cuando estaba por subir a su camioneta para viajar a La Calera y dos hombres armados que circulaban en una moto la sorprendieron, la tomaron de la ropa, la arrastraron por el suelo y luego le dispararon entre dos y cuatro veces frente a su vivienda en el barrio Faecap.
Por la causa se encuentran fueron detenidos dos hombres llamados Ediverto “El Brasileño” De Oliveira Pereyra y Emiliano “El Bocón” Vilchez“, sindicados como los autores materiales del crimen.
Lorenzetti, por su parte, fue detenido en La Calera, comunidad de 600 habitantes ubicada a 70 kilómetros de la capital de la provincia de San Luis, cuando regresaba a su casa luego de participar de una marcha con vecinos para pedir el esclarecimiento del asesinato.
En un primer momento, el ex intendente declaró ante la prensa que el hecho se trataba de “un crimen político” y apuntó directamente al ex senador, Alberto Leyes, cuya familia gobernó por años ese municipio hasta que él le ganó la última elección por escaso margen.
