Gendarmería realizó nueve allanamientos simultáneos en inmuebles ubicados en el barrio porteño de Floresta. Logrando desbaratar una organización narcoperuana, con vínculos familiares, que se dedicaba al comercio de drogas utilizando como centro de distribución un edificio usurpado.
En los operativos se decomiso 152 envoltorios con cocaína lista para comercializar, 1 kilo de material de corte para estirar el estupefaciente y dinero en efectivo, señalaron fuentes policiales a Online911.
Los procedimientos fueron llevados a cabo por la Unidad de Procedimientos Judiciales “Buenos Aires” en una causa investigada por el juez Claudio Bonadio.
Los gendarmes con el apoyo de la Unidad de Fuerzas Especiales y personal del Destacamento Móvil Uno, ingresaron a un edificio usurpado al que sus moradores denominaban el “Sheraton”. Lugar donde estiraban y distribuían el estupefaciente en el barrio de Floresta de Capital Federal.
La organización narcoperuana utilizaba a un menor de edad apodado como “El Jugador” para realizar la venta al menudeo. Desde la esquina de la casa el menor corría hacia distintas direcciones para subir a vehículos donde realizaba el intercambio.
“Arnol” era el apodó del líder de la banda. Los encuentros con sus compradores, los realizaba en inmediaciones de la zona, efectuando los intercambios desde su vehículo particular un Chevrolet Vectra. Como medida de seguridad cada 20 días cambiaba de equipo celular y de número de telefónico, rotando también el estupefaciente en diferentes departamentos del edificio usurpado.
Como resultado de los operativos se detuvieron a los principales actores de esta organización criminal, seis personas de nacionalidad peruana, se incautó: 224 gramos de cocaína de máxima pureza, 1 kilo de elementos de corte, 152 dosis de cocaína, 568 dólares estadounidenses, 37.000 pesos de moneda nacional, 28 celulares, 2 notebook y elementos de interés para la causa.
