La jueza federal de Garantías de Tartagal, Ivana Hernández, condenó a Rino Ríos Guillén a dicha pena por el delito de “tentativa de contrabando agravado por tratarse de estupefacientes con fines de comercialización”.
La Sede Descentralizada de Tartagal, a cargo del fiscal federal Marcos Romero, intervino en esta audiencia de juicio abreviado, en la cual la fiscalía presentó la propuesta de acuerdo al que había arribado con la defensa.
El hecho ocurrió el 25 de mayo pasado, cerca de las 14, cuando Ríos Guillén manejaba un camión marca Volvo con semirremolque térmico y llegó al puesto de control que posee la Dirección General de Aduanas en el Puente Internacional de Salvador Mazza, desde Bolivia.
Allí, Ríos Guillén sostuvo que el vehículo transportaba una carga de mil cajas de unidades de bananas, procedentes de Ecuador, que tenían como destino la provincia de Buenos Aires.
Una vez cumplimentados los trámites migratorios del caso, se procedió a examinar el camión con un escáner portátil, lo que permitió advertir imágenes inusuales en el sector de enganche del semirremolque.
Esto despertó la sospecha del personal aduanero, que reservó el rodado y al día siguiente continuó con la requisa, con la intervención de un can antinarcótico, que también marcó la presencia de drogas en el mismo sector del camión.
En base a ello, se convocó a personal de Gendarmería Nacional, perteneciente al Escuadrón 61, de la localidad de Salvador Mazza, ubicada en la frontera entre Salta y Bolivia, cuyos efectivos continuaron el procedimiento con los testigos civiles y el control judicial del caso.
En este marco, se retiraron las tuercas del enganche del semirremolque, en la parte inferior, y se encontraron 105 paquetes rectangulares de distintos colores en cuyo interior contenían una sustancia que luego se comprobó que se trataba de cocaína, con un peso de poco más de 105 kilogramos, por lo que se dio intervención al auxiliar fiscal Rafael Lamas, quien inició las actuaciones preliminares.
En la audiencia, el fiscal Romero especificó que, de acuerdo al peritaje químico correspondiente, de la droga incautada se pueden obtener 876.444 dosis, con un promedio de concentración del 83,30 por ciento, lo que evidencia “la grave afectación que podría haber causado a la salud pública”.
Tras el análisis de las pruebas, el fiscal mantuvo la calificación legal por la cual se acordó la condena.
“Quedó probado que Ríos Guillén ingresó al país con el estupefaciente, en la modalidad de ocultamiento; que conducía el camión que transportaba la cocaína; y que tuvo disponibilidad previa tanto del vehículo, como de la mercadería que transportaba y del estupefaciente”, sostuvo.
Por su parte, tanto el acusado como su defensa reconocieron y prestaron consentimiento a la propuesta presentada ante la jueza, quien homologó el acuerdo.
“El imputado reconoce no solamente los alcances del acuerdo, sino que también ha expresado que ha entendido cuales son las consecuencias”, señaló la magistrada, quien cerró la audiencia con la condena acordada por las partes.