Los 31 manifestantes detenidos el sábado por bloquear el tránsito en un camino interno de la mina Veladero, en San Juan, recuperaron hoy su libertad, luego de que la justicia comprobara que no tienen antecedentes penales.

El juez de Jáchal Pablo Nicolás Oritja dispuso a primera hora la liberación de los ciudadanos con domicilio en San Juan y a las 14.30 autorizó la libertad de los manifestantes que habían llegado de Córdoba, Santa Fe, La Pampa y dos chilenos con residencia en Buenos Aires.

Todos, según un comunicado del gobierno provincial, estaban “vinculados al bloqueo del camino a Veladero” y pudieron dejar la comisaría primera y la central de Policía, donde pasaron detenidos el fin de semana, después de que se constatara que “no había pedido de captura” en su contra.

El ministerio de Gobierno de San Juan indicó que el grupo de activistas estaba conformado por 20 hombres y 11 mujeres.

El sábado, los manifestantes, que usaron capuchas y pañuelos para cubrir sus rostros, se instalaron en un camino de la localidad de Iglesia para reclamar del cierre de la mina Veladero y protestar por sus efectos contaminantes, ya que en el último año se produjeron dos derrames de agua con cianuro.

Pero el sitio donde se ubicaron es un camino interno de la mina y además tomaron una garita de seguridad, de donde desalojaron al personal de seguridad privada, por lo que las empresas afectadas presentaron denuncias ante la justicia por “violación de domicilio” e “impedimento de estacionamiento y entorpecimiento de los transportes terrestres”.

El juez Oritja abrió una investigación contra los manifestantes tras ordenar el sábado por la noche su desalojo, ante las denuncias de las empresas minera y de seguridad privada.

Durante el operativo, indicó el gobierno, las fuerzas de seguridad les quitaron varias “bolsas de cal viva, bidones de nafta, caños con base de madera, mechas, trozos de hierro 8 pulgadas doblados, palos, barretas de hierro, un cuchillo y un cortaplumas y 12 escudos”.

El subsecretario de Derechos Humanos provincial, Jorge Rodríguez, y el director de Protección y Promoción de Derechos Humanos, José Rodríguez, constataron las condiciones en las que se encontraban los detenidos y dialogaron “con ellos y sus padres”, quienes aseguraron a los funcionarios que “se encontraban en buenas condiciones de salud”.

Según la cartera de Gobierno, el desalojo del sábado por la noche se concretó “sin bastones ni escudos, desarrollándose sin ningún herido”.