El Superintendente de Seguros de la Nación (SSN), Edgardo Podjarny, sufrió un sospechoso ataque el jueves por la noche, cuando tres hombres lo tomaron cautivo en una cochera del centro porteño cuando salía de su trabajo, lo golpearon y fueron hasta su casa, donde robaron una escasa cantidad de dinero.
El vicesuperintendente de Seguros, Guillermo Bolado, fue el encargado de dar detalles del caso a la prensa hoy y a través de esos datos planteó una serie de dudas sobre si se trató de un robo común o si el hecho tiene vinculación con la actividad del organismo.
Según explicó Bolado, todo empezó cuando Podjarny fue a buscar su auto estacionado en una cochera ubicada frente a la Superintendencia, cuyas oficinas están en Julio A. Roca (Diagonal Sur) al 700, en el microcentro porteño, a pocas cuadras de la Casa de Gobierno.
Allí tres personas armadas redujeron al superintendente y al empleado del garaje, le sacaron las llaves del departamento que posee en Palermo y fueron hasta el domicilio, donde estaban su mujer y dos hijos.
Bolado contó que los delincuentes “llamaron por su nombre” al titular de la SSN “y sabían de su cargo”. También relató que lo golpearon en la cabeza, le provocaron “heridas cortantes” y lo dejaron atado junto al empleado del estacionamiento durante tres horas, tiempo en el que estuvieron en su casa.
Otro dato que resaltó fue que los malhechores “le dijeron que habían intentado el mismo golpe el día anterior”, por lo cual, sostuvo Bolado, “no podemos descartar ninguna hipótesis”.
También destacó que “eran delincuentes bien vestidos, con ropa de marca”. Y además planteó dudas sobre el caso: “Nosotros estamos sufriendo operaciones de prensa desde que iniciamos la gestión. Como que somos ‘rigurosos’ con las inspecciones a las compañías y los capitales”, dijo Bolado al diario Clarín.
“No queremos hacer un juicio de valor, pero no descartamos ninguna hipótesis”, advirtió.