Una docente de 35 años que había ido a ver a su suegra internada fue secuestrada en el partido bonaerense de Merlo por una banda que primero la llevó a su casa, luego a un cajero automático y finalmente la liberó tras el cobro de un rescate en Ituzaingó, informaron hoy fuentes policiales.
Entre el robo en la casa, la ida al cajero y el cobro del rescate, la banda se apoderó de más de 30.000 pesos y de un Peugeot 207, precisaron los voceros.
Si bien trascendió hoy el secuestro ocurrió entre la noche del martes y la madrugada de ayer y duró alrededor de dos horas.
La víctima -cuya identidad se mantiene en reserva-, salió a las 23 del martes de la clínica Dávila, ubicada en la localidad de Ituzaingó, donde había ido a visitar a su suegra que estaba allí internada.
Luego de despedirse de su novio, también docente, se subió a su auto, un Peugeot 207 gris, para dirigirse a a su casa del partido de Merlo..
Cuando sólo le faltaban cinco cuadras para llegar, la mujer fue interceptada en la esquina de las calles Rawson y Pellegrini, de Merlo, por dos delincuentes que le cortaron el paso con un Peugeot 206, se bajaron de ese auto y armados se subieron al 207 de la docente.
Los asaltantes obligaron a la víctima a ir a su propia casa, en el cruce de las calles Victoriano Loza y 1° de Mayo, de Merlo, y allí se apoderaron de una suma de alrededor de 20.000 pesos que la docente tenía guardados como ahorros.
No conformes con ese dinero, los delincuentes llamaron por teléfono al novio de la víctima y transformaron el robo en un secuestro extorsivo, en el que exigieron por su liberación un rescate de 40.000 pesos.
Luego de una serie de llamados y negociaciones, los secuestradores bajaron sus pretensiones y acordaron liberar a la mujer a cambio de 3.000 pesos y 400 dólares, es decir unos 9.000 pesos tomando el valor del dólar a 15 pesos.
Pero cuando salieron a cobrar el rescate con la víctima, los delincuentes decidieron hacer una parada en el cajero automático de un Banco Provincia ubicado en 9 de Julio y 25 de Mayo y con su tarjeta de débito extrajeron 2.000 pesos más.
El pago del rescate se realizó en la esquina de la clínica Dávila, de Ituzaingó, donde estaba internada la suegra de la víctima.
Según las fuentes, en el cruce de Olazábal y Olavarría, el novio de la docente les dio a los delincuentes los dólares y pesos del rescate y la mujer fue liberado en ese mismo sitio.
El novio de la secuestrada llegó a llamar a la policía para denunciar el secuestro extorsivo pero cuando lo detectives de la Delegación Departamental de Investigaciones (DDI) de Morón llegaron a la clínica de Ituzaingó para entrevistarse con él y asesorarlo, el pago y la liberación ya se habían concretado.
Los captores huyeron con el auto Peugeot 207 de la víctima, patente ITL 359, que aún no pareció, ya que el auto con el que iniciaron el secuestro, el Peugeot 206, lo dejaron abandonado en el lugar de la interceptación de la víctima.
Efectivos de la comisaría 1ra. de Merlo secuestraron ese auto y pudieron determinar que había sido robado el martes en la localidad de San Antonio de Padua.
Al tratarse de un secuestro extorsivo, la causa judicial quedó en manos del fiscal federal 2 de Morón, Hernán García, quien ya impartió directivas para que se trabaje en el análisis de comunicaciones y cámaras de seguridad, con el objetivo de poder identificar a alguno de los autores del hecho.