La Cámara de Apelaciones confirmó el proceamiento del taxista que asesinó a su mujer en medio de un bar el pasado dos de agosto de este año en el barrio de Caballito.
El dicatamen de los camaristas afirma que “no se encuentra cuestionada la materialidad del hecho ni la autoría del mismo por parte del imputado y que el cuadro probatorio formado autoriza a sostener la presunta capacidad de culpabilidad en el grado que exige la etapa del proceso”.
Agregaron que “las circunstancias pormenorizadas permiten afirmar que la conducta del procesado había sido preparada con anticipación y actuó en un escenario planeado, llevando elementos propios y mensajes dirigidos a la víctima. En consecuencia, afirma que el acusado actuó con conocimiento y voluntad, en un acto previsto, por lo cual no es posible sostener que el trastorno mental que padece -agudizado por el consumo de estupefacientes- le hubiera impedido actuar en forma libre”.
El taxista había convocado a su ex esposa con el pretexto de hablar con ella. Ella aceptó pero, para evitar riesgos, eligió un lugar público y lleno de chicos, decidió que fuera a plena tarde y le pidió a un amigo que la acompañara.
Pero su ex llegó al bar Plaza del Carmen, en Caballito, con una cuchilla escondida y cuando ella se distrajo, la apuñaló. Después escapó e intentó suicidarse mientras algunos clientes del bar trataban de detenerlo y otros intentaban salvar a la mujer. No lo lograron. La mujer, de 49 años, murió camino al hospital.
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