Cayó la banda de los “politruchos”: se dedicaban al secuestros y robos

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Una banda de delincuentes que cometían asaltos y secuestros extorsivos vestidos como policías fue desbaratada en las últimas horas luego de cinco allanamientos realizados en diferentes localidades del conurbano.

Los operativos estuvieron a cargo de efectivos de la DDI Pilar, quienes detuvieron a los cinco integrantes del grupo delictivo, de entre 19 y 44 años y quienes también se dedicaban a cometer entraderas; y secuestraron varias armas y elementos robados durante el hecho.
Las pesquisas que permitieron desmantelar al grupo criminal comenzaron el 8 de julio pasado cuando los sujetos ingresaron armados y vestidos con ropas similares a las policiales a un comercio mayorista ubicado en Derqui, partido de Pilar.
Allí redujeron al propietario y a su hijo y les exigieron la suma de un millón de pesos que decían saber que se encontraba en el local, pero como ese dinero no estaba allí se pusieron violentos y le produjeron un corte al joven en una de sus piernas.
Tras ello, robaron 100 mil pesos, 25 bultos de cigarrillos y tarjetas telefónicas, valuados en 120 mil pesos; y una camioneta Citröen Berlingo en la que se llevaron privado de la libertad al hijo.
Luego, llamaron a su madre y le solicitaron dinero para su liberación, y tras el pago de 8 mil pesos y más tarjetas telefónicas lo dejaron en la esquina de Los Cipreses y Güemes de la localidad de La Lonja.
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El joven fue derivado a un hospital de Pilar, donde fue asistido, y la camioneta fue hallada abandonada sobre la colectora de la autopista Panamericana, cerca de un conocido hotel.
En tanto, los efectivos llevaron a cabo diferentes análisis de comunicaciones durante dos meses y determinaron que las viviendas de los delincuentes se encontraban en Derqui, Adolfo Sordeaux, Los Polvorines e Ingeniero Budge, por lo que fueron allanadas con colaboración del Grupo Halcón.
En los inmuebles se incautaron dos pistolas 9 milímetros, una con pedido de secuestro; una escopeta calibre 20, un revólver del 22, cargadores de diferentes tamaños, una gran cantidad de municiones 11,25, uniformes similares al de policía, correajes, 25 mil pesos, 115 tarjetas de telefonía, chequera y varios teléfonos celulares. Interviene en la causa el Juzgado Federal de Campana, a cargo del Dr. Adrián González Charvay.