La trata de personas mueve casi tanto dinero como las drogas y las armas

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Fernanda Gil Lozano – precandidata a diputada por el Frente renovador

Con motivo de conmemorarse el próximo jueves 30 de julio el Día Mundial contra la Trata, Fernanda Gil Lozano, Precandidata a Diputada Nacional para el Parlasur por el Frente Renovador, difundió un informe en el que revela que el comercio de seres humanos mueve en el mundo entre 7.000 y 10.000 millones de dólares al año, casi tanto como el narcotráfico y la venta de armas. También destaca que hasta 2 millones de niños están sujetos a la prostitución en el comercio sexual mundial; y que casi 21 millones de personas son víctimas de trabajo forzoso, de las cuales más de la mitad son mujeres y niñas.

Según el estudio del Servicio Jesuita a Migrantes, “el tráfico ilícito de personas es el comercio que está experimento un crecimiento más rápido”, convirtiéndose en un “floreciente negocio que no deja de crecer dentro de la nueva economía global”.

La referente del massismo también se remitió a datos de la Organización de las Naciones Unidas y explicó que “combinando el tráfico a larga distancia con el contrabando transfronterizo, surge un panorama global de “comercio de seres humanos” que afecta al menos a 4 millones de personas cada año. Además detalló que “si a la cifra del comercio de seres humanos se sumasen los beneficios obtenidos del tráfico de migrantes, según Interpol, la cifra ascendería a 39.000 millones de dólares al año”.

En tanto, Gil Lozano también explicó que “aunque la forma de trata detectada en un 80 % de los casos es la explotación sexual, existen otras dos formas de explotación de personas: la que tiene como fin la explotación laboral y la trata para el tráfico de órganos”.

El relevamiento avalado por la histórica defensora de los derechos de las mujeres y niños, advierte que es más fácil que una mujer caiga víctima de la trata que un hombre. La Organización Internacional de las Migraciones cifra en medio millón el número de mujeres que entran todos los años en Europa Occidental para ser explotadas sexualmente.

En el negocio de la trata con fines de explotación sexual existe otro sector particularmente vulnerable: los menores. Según Unicef, hasta dos millones de niños están sujetos a la prostitución en el comercio sexual en el mundo. Pero la trata de menores presenta otras manifestaciones muy graves: la adopción ilegal de niños extranjeros; el tráfico de órganos; el secuestro de menores para ser utilizados en los conflictos armados o en el ejercicio de la mendicidad.

La Precandidata a ocupar un lugar en el Parlamento del Mercosur explicó que “la segunda forma de explotación de personas detectada con más frecuencia es la trata con fines de explotación laboral. Según la Organización Mundial del Trabajo (OIT) el dato global de personas víctimas de trabajo forzoso alcanza la cifra de 20.900.000 personas. Esta explotación se efectúa en sectores como la construcción, la agricultura, la industria textil, el servicio doméstico, etc. Esta trata no es una simple violación de los derechos de los trabajadores, sino que sus víctimas están sometidas a unas condiciones de trabajo inhumanas.

En Argentina, según datos relevados por Gil Lozano, en conjunto con diferentes organizaciones de lucha contra la trata, “la cantidad de víctimas ya superó las quinientas mil en todo el país y sigue en ascenso permanente”. Al respecto, la ex Diputada Nacional consideró que muchos de los problemas se deben precisamente al modo parcial en que el Gobierno reglamentó la Ley de trata de personas.

La referente massista detalló que “no se ha regulado, soslayando la importancia vital para la construcción de un proyecto de vida para las víctimas, un compendio de aspectos vinculados a la reinserción de las víctimas (contemplando la asistencia psicológica, médica, educativa, etc).

En este sentido, la precandidata parlamentaria también denunció que “el Gobierno Nacional manipula los datos sobre las víctimas porque sólo las acompaña hasta que declaran pero luego no se trabaja con ningún tipo de acompañamiento ni contención psicológica o médica, no se les otorga ningún subsidio ni ninguna capacitación de reinserción laboral, lo que genera que en la mayoría de los casos, al poco tiempo, esas personas vuelvan al circuito del cual se las rescató”.

Por su parte, la dirigente anticipó que ya se reunió con Sergio Massa en un encuentro en donde acordaron “rechazar cualquier proyecto a favor de la reglamentación de la explotación sexual y aunar esfuerzos para amplificar las tareas de lucha contra las redes de trata”.

Finalmente, Gil Lozano aseguró que “va a trabajar para cambiar la cultura de la explotación, de la competitividad y de la falta de control que reina en la actualidad” y concluyó diciendo que “el Gobierno Nacional trata de difundir datos alentadores pero la realidad muestra que no asigna los recursos necesarios y que no existe una verdadera gestión coherente para combatir esta problemática”.