Todo comenzó cuando efectivos de la Brigada de Operaciones Zona Sur, dependiente del Departamento Operaciones Narcocriminalidad de la Policía de la Ciudad realizaban una recorrida de prevención ya que se había alertado al 911 acerca de una banda integrada por argentinos y colombianos que operaba en dicho barrio, luego de ingresar la droga desde la provincia de Buenos Aires.
Voceros policiales informaron que en la calle Pichincha al 400, los agentes observaron un automóvil Peugeot 308 con la chapa patente borrada, por lo cual le ordenaron al conductor detener la marcha.
El hombre realizó algunas maniobras evasivas pero finalmente se detuvo a los pocos metros.
El conductor y su ocupante fueron identificados y uno de ellos dijo: “Buen día muchachos, no pasa nada, soy gendarme”.
Se trataba de dos hombres de 43 y 44 años, uno de nacionalidad colombiana y el otro argentino, quien presentó una credencial que lo acreditaba como miembro de la Gendarmería Nacional Argentina (GNA) pero que comenzó a mostrarse nervioso a medida que avanzaba el procedimiento.
Luego, los policías advirtieron que en el asiento trasero del vehículo había una mochila gris con vivo naranja, que fue requisada ante la presencia de testigos y encontraron en su interior diez ladrillos de cocaína, con un peso total de 10 kilogramos y medio.
Asimismo, dentro de la mochila también se halló un uniforme completo de la GNA, informaron fuentes policiales.
El Juzgado Nacional en lo Criminal y Correccional Federal 11, subrogado por Julián Ercolini, avaló las actuaciones, el secuestro de la droga y del rodado, y dispuso el traslado de los sospechosos a una comisaría.
