Pablo Ventura, el remero detenido en Zárate tras el crimen de Fernando Báez Sosa en Villa Gesell y liberado cuatro días después por falta de pruebas, fue sobreseído esta tarde por orden del juez de Garantías David Mancinelli, informó el abogado del joven, Jorge Santoro.

José María Ventura, padre de Pablo (21), aseguró esta tarde a Télam que con esa medida a favor de su hijo, en su familia ahora están “contentos, completamente tranquilos y ya liberados”.

El hombre señaló que ya habían comenzado a retomar sus actividades normales y, pese a que se iban a tomar unos “tres o cuatro días de vacaciones”, contó que ayer decidieron abrir la farmacia familiar en la que trabajan, donde la gente fue a darles aliento y abrazarlos.

“Nos merecíamos un bálsamo en el corazón”, dijo José María y concluyó que Pablo “se encuentra bien” y que está “más fuerte” que él y su esposa.

Por su parte, el abogado Santoro señaló que “la alegría es medida”, ya que no se olvidan que “hay una víctima de 19 años en el medio, y en ese sentido”, tanto la familia Ventura como él “tienen mucho respeto por eso”.

El letrado explicó a Télam que los Ventura fueron notificados esta tarde, vía la Policía de Zárate, de la decisión del magistrado luego de que los propios abogados de los padres de Fernando adhirieron esta mañana a la solicitud de sobreseimiento presentada previamente por la defensa.

El sobreseimiento del remero había sido pedido por Santoro al juez Mancinelli pocas horas después de que el joven fue liberado por falta de elementos que lo vincularan al crimen de Fernando (19).

En ese planteo, Santoro consideró que “las pruebas presentadas y los testigos aportados fueron contundentes respecto de la inocencia de Pablo”.

Entre los elementos mencionados por el abogado para fundamentar el pedido figuró la filmación del restaurante “La Querencia” de Zárate de la noche del viernes 17 de enero, que registró el ingreso de Ventura junto a sus padres para cenar y su salida cerca de la medianoche, pocas horas antes del crimen de Fernando frente al boliche “Le Brique”, en Villa Gesell.

Además, destacó que “no se lo ubica en la escena del lamentable hecho”, y que “han depuesto los testigos propuestos” por la defensa que “en forma contundente lo ubican en la localidad de Zárate al momento del hecho”.

“Se cayó definitivamente la idea expuesta de que había sido ‘sacado en forma clandestina’ de Villa Gesell, ya que los rodados de la familia se comprobó que nunca salieron de Zárate”, consideró el abogado y agregó que “estuvo siempre a derecho, presentándose a indagatoria y respondiendo a todo requerimiento” de la fiscal de la causa, Verónica Zamboni.

El pedido de Santoro fue avalado luego por la fiscal y en un escrito presentado este mediodía ante el juez Mancinelli por el abogado Fabián Améndola, quien encabeza la querella por parte de la familia junto a Fernando Burlando.