Junto a su pareja, había amasado una fortuna en base a la explotación sexual en Chile. Luego de varios años comenzó operar en la provincia de Córdoba, donde había montado un estudio audiovisual con una sola finalidad: confeccionar álbumes de fotos para que las víctimas fueran exhibidas en diferentes páginas digitales y redes sociales.
El Ministerio de Seguridad de la Nación, a cargo de Patricia Bullrich, comenzó a investigar a principio de septiembre. El principal apuntado permanecía prófugo de la justicia luego de la detención de su esposa. Las tareas de campo que realizó la Policía Federal Argentina permitieron conocer su paradero en la localidad de Funes, provincia de Santa Fe.
“Estamos haciendo un trabajo muy fuerte para que todos aquellos que cometieron algún delito asuman sus responsabilidades. Lo hacemos junto a las fuerzas federales, invirtiendo en inteligencia criminal y despliegue territorial”, afirmó la ministra de Seguridad, Patricia Bullrich, quien instruyó políticas expresas a la Secretaría de Seguridad que dirige Eugenio Burzaco.
La delegación Rosario de la Policía Federal –institución que comanda Néstor Roncaglia- sumó todos los elementos probatorios que se habían ido acumulando durante años. El fugitivo, junto a su mujer, había formado parte de una organización trasnacional dedicada a la trata de personas con fines de explotación sexual en Chile desde 2003.
Esa causa se unificó con otra de 2012 en la provincia de Córdoba. Entonces había trabajado personal de la Gendarmería Nacional, que profundizó la pesquisa sobre la pareja. Se estima que han obtenido importantes ganancias producto de la explotación sexual de mujeres de diferentes nacionalidades. La mujer había sido aprehendida en Rosario, en tanto que el responsable del armado de los álbumes de fotos había logrado escapar.
Los policías llevaron a cabo tareas encubiertas, seguimientos y vigilancias, y obtuvieron información exhaustiva acerca de la vivienda en la que estaría viviendo el delincuente. Ante eso, montaron un dispositivo de seguridad en la localidad de Funes, provincia de Santa Fe, y lo interceptaron cuando circulaba en un vehículo con pedido de secuestro, sobre la calle Lejarza al 700.
Intervino el Juzgado Federal N° 1 de Córdoba, a cargo de Ricardo Bustos Fierro, a través de la secretaría Penal de Facundo Troncoso.
