A partir del asesinato de Jonathan Funes, acribillado el 5 de febrero pasado, la Policía Federal, por pedido de la Unidad Especial de Homicidios Dolosos, y en coordinación con la Policía local, llevó adelante catorce allanamientos simultáneos en Rosario para identificar a los presuntos responsables del crimen y colaborar con la justicia en el esclarecimiento de los hechos.
Como resultado de la intervención de la fuerza que conduce Néstor Roncaglia, se detuvo a 41 personas. En los allanamientos se secuestraron todo tipo de bienes y elementos: autos de alta gama, una lancha, una moto de agua, y un arsenal de armas –una pistola Taurus calibre 32, dos pistolas calibre 22 y dos calibre 380, una escopeta calibre 12.70 y dos pistolas calibres 25 y 635- con más de 180 cartuchos, cargadores, un cartucho antitumulto y un silenciador.
Además, se secuestraron 19 vehículos con faltantes de piezas y autopartes dispersas. Uno de los autos estaba en pleno proceso de desguace y se comprobó que tiene un pedido de secuestro por robo y se detectaron 17 chapas patente.
Por último, se incautaron 370 gramos de cocaína y más de medio kilo de sustancia de corte y estiramiento de droga, dispositivos tecnológicos, cheques, balanzas, cámaras de seguridad, 41 celulares y documentación.
Los allanamientos fueron resultado de una exhaustiva investigación que lleva a cabo la institución a instancias del Juzgado de Primera Instancia de Rosario del Dr. Héctor Núñez Cartelle, junto a la Unidad Especial de Homicidios Dolosos que integran los fiscales Florentino Malaponte y Pablo Pintos.
