Un testigo complicó a la acusada de atropellar y matar a su novio

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La fiscal que tiene a su cargo la investigación por la muerte de Genaro Fortunato (25) aseguró ayer que tiene elementos suficientes como para pedir la prisión preventiva de la novia del rugbier y dijo que un testigo presencial del hecho aseguró que la mujer giró en “U” para “arrollarlo y pasarle por encima”.

Al relatar la mecánica del hecho en la que murió Fortunato, la fiscal Andrea Rossi explicó en una rueda de prensa que Julieta Silva (29) “salió (del boliche), se subió a su auto que estaba estacionado, y en ese momento llegó Fortunato para hablar, pero hizo marcha atrás y lo hizo caer”.

“Silva salió del lugar y recorrió unos 150 metros, luego dio una vuelta en ‘U’ y regresó. Fue en ese entonces, que lo arrolló y mató”, relató la funcionaria judicial, quien aclaró que en ningún momento lo atropelló, sino que “le pasó por encima”. Esa versión que quedó incorporada a la causa que tiene a su cargo la fiscal Rossi la aportó un cuidacoche que trabajaba a la salida del boliche, que fue quien le hizo señas a la mujer para que detuviera su marcha tras arrollar a Fortunato.

La fiscal explicó que tiene “elementos suficientes como para pedir la preventiva de la mujer”, a quien ayer le imputó el delito de “homicidio doblemente calificado por el vínculo de pareja y su comisión por alevosía”, el cual tiene una pena en un futuro juicio de prisión perpetua.

En tanto, en principio la justicia rechazó un pedido de una defensora oficial para que le otorguen a Silva una prisión domiciliaria, por lo que la imputada fue trasladada a un penal.

Sin embargo, la fiscal consideró que seguramente la defensa “insistirá con la prisión domiciliaria y será un juez quien resuelva si están dadas las condiciones o no”.

Ayer también habló la mamá de Agostina Quiroga, la ex novia de Fortunato, para aclarar algunas situaciones vinculadas a la relación que su hija (embarazada de cuatro meses) y el rugbier habían mantenido durante casi seis años.

La mujer negó que su hija le hubiera mandado a Silva un mensaje de texto en la madrugada del sábado, supuestamente informándole de su embarazo y que Genaro era el padre del bebé. “Mi hija no sabía quién era esa mujer. Nunca la conoció, nunca tuvo acceso a nada, porque la desconocía totalmente”, afirmó la mujer.

Según contó, Agostina y Genaro se conocieron cuando ella tenía 16 años en el club Belgrano. El jugaba al rugby y ella al hockey. Se conocieron ahí y se pusieron de novios. Sobre el embarazo de Agostina, la mujer contó que Genaro “sabía que iba a ser papá, sus amigos también lo sabían, todos sus amigos sabían que iba a ser papá”.