El juez a cargo de la causa por el crimen de Gloria Enriqueta Sierra, la abogada y proteccionista de animales que fue asesinada en su casa del barrio porteño de Flores, evaluará hoy si el detenido está en condiciones de ser indagado por el homicidio ya que es un paciente con antecedentes psiquiátricos, informaron hoy fuentes judiciales.
El juez Roberto Ponce, quien subroga durante la feria judicial el Juzgado en lo Criminal y Correccional 5, ordenó que el imputado Pablo Barberio (49) sea trasladado esta madrugada a la alcaidía del Palacio de Tribunales con un informe médico interdisciplinario.
Desde que fue detenido la madrugada del lunes pasado, Barberio estuvo internado con custodia policial en el Hospital Alvear de emergencias psiquiátricas.
El juez Ponce y el fiscal de la causa, Fernando Fiszer, quieren evaluar los informes de ese hospital y los que elabore el Cuerpo Médico Forense para determinar si el acusado está ubicado en tiempo y espacio y en condiciones de comprender que está imputado de un delito, para ver si puede ser sometido a una indagatoria.
El padre del imputado, Ernesto, confirmó hoy al canal C5N que su hijo “estaba bajo tratamiento”, que tomaba “medicación psiquiátrica” y que también era proteccionista de animales como la víctima, ya que en la casa tiene “ocho perros”.
“Todos los que se dedican al proteccionismo tienen un cable flojo, están todos medio chiflados”, dijo el padre de Barberio en la puerta de su domicilio de la calle César Díaz 5714, en Villa Luro, donde el imputado fue detenido la madrugada del lunes pasado.
Ernesto también comentó que tanto el viernes -día en que se estima fue cometido el asesinato-, como el domingo antes de su detención, estuvo con su hijo y no lo notó nervioso ni alterado por nada.
Agregó que la policía le comentó que en la casa de la víctima “faltaba una escritura” y se preguntó: “¿Para qué Pablo va a querer una escritura?”.
Sierra (67), una ex presidenta del Movimiento Argentino de Protección Animal (MAPA), fue hallada asesinada el lunes a la madrugada en su casa de la calle Bolivia al 706 del barrio porteño de Flores con signos de haber sido estrangulada y con un fuerte traumatismo de cráneo.
La víctima llevaba entre 48 y 72 horas de muerta, por lo que se estima que fue asesinada el viernes a la noche o el sábado a la madrugada.
Justamente, vecinos de la víctima afirmaron a la policía que el viernes pasado a la tarde habían escuchado una discusión a los gritos en la vivienda, entre la abogada y el hombre, algo que ocurría desde “hace algún tiempo”.
De acuerdo con el informe, la mujer se encontraba sola en la vivienda con el agresor, ya que su esposo, Miguel Angel Di Ciancio, permanecía internado al momento de ocurrir el hecho por haber sufrido un ACV tiempo atrás.
El crimen fue denunciado por un joven de 17 años, bombero e hijo de una ex pareja del imputado, quien el domingo se presentó en la comisaría 50 para denunciar que Barberio, con quien él tenía una excelente relación, le había confesado que había asesinado a una mujer.
Ante la sospecha de que la muerta pudiera ser la abogada, el joven pidió a la policía que se allane la vivienda en el barrio de Flores, y, a partir de esta denuncia y de la preocupación de los vecinos que señalaron a la policía que la víctima no respondía los llamados telefónicos ni atendía cuando llamaban en su casa, la policía dio intervención judicial y efectivos de la seccional 44 entraron a la propiedad y hallaron el cadáver.
Fuentes policiales señalaron que en la vivienda de la víctima fueron encontrados 12 perros, 11 gatos y 2 aves que la mujer había recogido de la calle y los tenía a su cuidado en la vivienda hasta poder conseguir alguna persona que se interesara por uno de los animales.
De acuerdo con el informe, se destacó que en el domicilio de Barberio se encontraron gatos bebés muertos en la heladera y cachorros de perros en frascos con formol.
Amigas de la víctima, también dedicadas al proteccionismo de los animales, solicitaron a las autoridades encontrar un hogar de tránsito lo más rápido posible para trasladar a los gastos y perros que tenía la mujer en su casa.
