Más de un millar de gendarmes y policías realizaban esta mañana numerosos allanamientos en la villa 1-11-14 del barrio porteño del Bajo Flores, en busca de drogas y delincuentes, informaron fuentes del Ministerio de Seguridad de la Nación.
Hasta el momento, el comisario Néstor Roncaglia, jefe de la Policía Federal, informó que detuvieron a 15 personas y secuestraron media tonelada de marihuana, 400 kilos de cocaína y 45 mil dosis de paco. Además, hallaron 12 armas de fuego.
La sospecha es que el capo narco peruano, Marcos Estrada González, seguiría manejando el negocio en la villa desde la cárcel de Ezeiza, donde está detenido desde diciembre del año pasado.
“Marcos sigue siendo el líder”, anunció en el lugar el jefe de la Policía Federal, en una rueda de prensa. Roncaglia dijo que tanto él como su mujer seguirían a cargo del negocio, pese a encontrarse ambos detenidos.
A partir del hallazgo, y por orden del juez federal Sergio Torres, se ordenó allanar las cárceles de mujeres y hombres de Ezeiza, donde el capo narco y su mujer están alojados.
