Allanan dos depósitos de manteros y descubren un prostíbulo

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Por los operativos que se vienen realizando contra la mafia de los manteros en la zona de Liniers, se desbarataron dos depósitos donde estas organizaciones guardaban la mercadería. Pero en uno de estos depósitos la policía se llevó una sorpresa al ver que en el mismo lugar funcionaba además un prostíbulo y un taller clandestino.

Al ingresar al lugar observaron que el ambiente anterior a las habitaciones donde se escondía la mercadería, estaba ambientando como un prostíbulo. Había una cama de dos plazas, mesas de luz, cortinas de entrada, preservativos nuevos y usados y rollos de papel. También había un patio cubierto en su totalidad por un toldo, colocado con el fin de no despertar sospechas entre los vecinos, y en el pasillo de entrada había colocadas cámaras de seguridad. Según los vecinos, la dueña del lugar decía que era un “Spa y Centro de Belleza”. Para acceder al servicio, el código era que había que llamar previamente y esperar en la puerta.

Otro hallazgo fue el taller clandestino del primer piso, en donde se encontró gran cantidad de mercadería, y gran cantidad de bolsas de retazos de tela que se usaban para el relleno de almohadas, almohadones y acolchados. Estos productos eran confeccionados y distribuidos a los manteros para la venta callejera ilegal.

En todos los pasillos del edificio había recovecos, puertas, ambientes y terrazas usadas como depósitos. En estos escondites se encontraron anteojos, artículos de marroquinería, carteras, gran cantidad de bolsas de guata y retazos de tela, paraguas, juegos de sábanas, zapatillas y juegos de mesa.

A pocas cuadras, también se clausuró un local de venta de prendas y lencería que además era usado como depósito. Ahí se secuestró ropa interior, lencería, medias, camperas y dos carros de manteros.

Según el testimonio de vecinos, esta modalidad de “depósitos o aguantaderos” se da mucho en el barrio de Liniers, y es muy común ver gente que va casa por casa, local por local ofreciendo una suma a cambio de poder dejar carros, puestos, bolsones y cajas de mercadería. También buscan habitaciones precarias para darle alojamiento barato a los vendedores callejeros, víctimas de la organización.

Los operativos estuvieron a cargo de la División de Contravenciones y Faltas de la Superintendencia de Investigaciones de la Policía de la Ciudad, y se contó con la colaboración de la Dirección de Fiscalización del Espacio Público y la Dirección General de Migraciones.

Interviene la Fiscalía en lo Penal, Contravencional y de Faltas N° 21, a cargo de la Dra Celsa Ramírez.