Tras el hallazgo del cuerpo del abogado Armando Bautista en su oficina del barrio porteño de Monserrat, luego de que la noticia del homicidio recorriera todos los medios de comunicación, Brian Atahualpa Romero López fue a buscar a su novia y decidió refugiarse con ella en un hotel de Longchamps.
Romero López fue un asesino descuidado. Pasó los días intentando recordar algún cabo suelto en la escena del crimen y tal vez recordó que le faltaba algo en su mano, pero no le dio importancia y siguió con su plan.
Romero amenazaba abiertamente a Bautista para exigirle dinero y los amigos de éste sabían la identidad de aquel. Era conocido en el circuito de la prostitución masculina de esa zona porteña.
Después de matarlo, mientras acondicionaba el cuerpo de Bautista, perdió un anillo, o lo olvidó. En él había una calavera y cuando los investigadores ampliaron la foto de perfil de WhatsApp de Brian vieron que llevaba puesto el anillo olvidado o perdido.
Con esos datos, más el de la supuesta ubicación de Brian en un hotel, el fiscal Sandro Abraldes ordenó a la División de Homicidios y al personal de la comisaría 4ta de Longchamps un operativo.
Brian Romero López salía con su pareja del Hotel “La Yamilita”, ubicado en la calle Azcasubi 1257, cuando fue rodeado por los efectivos y finalmente detenido.
