La beba denunciada como robada por su madre murió de frío

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La autopsia determinó que murió de frío la beba que había sido denunciada como robada de un hospital de la localidad cordobesa de Unquillo y cuyo cuerpo fue encontrado 16 días después en la casa de su madre, informó una fuente con acceso al expediente.

A raíz de este caso, la madre de la víctima quedó presa junto a su pareja luego de haber realizado una falsa denuncia del robo de su hija tras deshacerse de ella.

El cadáver de la beba fue encontrado, el domingo en una bolsa plástica adentro del placard de la humilde casa de Dayana Gorosito (21) en el marco de un operativo ordenado por la Justicia.

A raíz del hallazgo de algunas hojas secas y tierra en la bolsa, los investigadores creen que la mujer tuvo el parto en algún lugar al aire libre, agregaron los voceros.

La mujer está detenida desde el 24 de mayo, cuando la Justicia le imputó el delito de “homicidio calificado por el vínculo”, lo que está penado con la prisión perpetua, a pesar de que el cuerpo de la beba no había sido hallado.

Al momento de ser acusada, Gorosito estaba internada en un hospital de la ciudad de Córdoba, donde había ido a hacerse atender por algunas afecciones urinarias derivadas del parto.

Tras su imputación, la Justicia local dispuso que se le asignara en ese centro de salud una custodia policial, de la que logró zafar y huir al día siguiente, no obstante, Gorosito fue detenida horas después en su casa de Unquillo y, una vez curada de su problema de salud, fue alojada en el penal de Bouwer.

La mujer había denunciado que el viernes 20 de mayo había ingresado en trabajo de parto al hospital provincial Profesor José Miguel Urrutia de Unquillo y que luego de parir una beba le informaron que había nacido muerta y le mostraron un cuerpo que nunca le entregaron, razón por el cual denunció el robo de la criatura.

Las autoridades del hospital negaron desde el inicio el hecho y aseguraron que no había registro alguno del ingreso de la mujer a ese centro asistencial y que incluso la sala de partos no se había utilizado.

Cuatro días después de la denuncia, la fiscal de Violencia Familiar local, Mercedes Ballestrini, imputó a Gorosito por ‘homicidio calificado por el vínculo’, al igual que su pareja, Luis Oroná, ya que tenía elementos para suponer que la mujer se había hecho un aborto o había tenido un parto clandestino, para luego deshacerse de la bebé.

La pareja tiene un niño de tres años y, según familiares de Oroná, él no estaba al tanto de que su mujer había tenido a la beba y la había escondido en la casa, sino que creyó en la denuncia que realizó sobre que le habían robado a su hija en el hospital.