Científicos de la Policía Federal lograron establecer que desde la pistola Taurus 9mm registrada a nombre de Javier Hernán Pino salieron los disparos que acabaron con la vida de cinco personas en los últimos 8 meses.
“Es importante destacar que todas las policías del país continúen remitiendo al SAIB tanto el armamento como las vainas y los proyectiles para que queden registrados en la base del sistema, y demostrar así que si siguen el protocolo se pueden esclarecer homicidios como en este caso, que son asesinatos ocurridos en tres jurisdicciones distintas”, remarcó un alto oficial que revista en la jefatura de la PFA al mando del comisario general Román Di Santo.
El SAIB acumula la evidencia balística o arma secuestrada remitida por las autoridades judiciales y policiales de las provincias adheridas al protocolo, con el fin de establecer un registro en la Base Central Nacional de Evidencia Balística. Del análisis de correlación con la información ya almacenada se logra establecer la trazabilidad de las armas y los proyectiles empleados en hechos delictivos investigados por la justicia.
