Una fiscal pidió que el sindicado jefe de una de las facciones de la barra brava de River, Adrián Rousseau, sea condenado a cuatro años de prisión por “lesiones graves” contra otros dos hinchas en el episodio conocido como “La batalla del playón”.
El pedido lo formuló Dafne Palópoli al Tribunal Oral en lo Criminal (TOC) 15 a cargo del juicio que continuará el 11 de diciembre cuando está previsto el alegato de la defensa.
Fuentes judiciales informaron que la fiscal no acusó a los sindicados barrabravas también imputados, Matías Goñi (38) y Cristian Pineda (41), quienes al igual que Rosseau llegaron libres al debate.
Para Palópoli, la agresión de los liderados por Rousseau ( 41) fue por “codicia”, para mostrar “poderío y recuperar el mando de la barra con intenciones económicas”, lo que llevó al grupo agresor a atacar con armas “para herir a los del bando contrario”.
La fiscal dijo que Rousseau es “el que paga los platos rotos”, pero “los dirigentes, policías y los que pudieron beneficiarse con esto, quedaron impunes”.
El viernes 11 continuará el juicio cuando el abogado Ignacio Irurzún, representante de Rousseau, alegue ante los jueces Hugo Decaría, Enrique Gamboa y Cristina Bertola.
El debate comenzó el 22 de octubre en los tribunales ubicados en Lavalle 1171, donde tanto Rousseau como Pineda se negaron a declarar, mientras que Goñi afirmó que él ese día “no estaba en el lugar”.
Luego declaró una de las víctimas, Carlos Ariel “Urko” Berón, quien señaló a Rousseau como quien le provocó heridas punzo cortantes en el pecho, axila y cuello.
También resultaron lesionados en este ataque Roque Emmanuel “Rocky” Raposo, Mauricio Aguirre, Salvador Estrada Vigil y Raúl Alejandro Etcheverry, quien falleció en 2009 en un accidente de auto.
El hecho ventilado en el juicio se registró el 6 de mayo de 2007, al término del partido entre River e Independiente, cuando un grupo supuestamente liderado por Rousseau se enfrentó con armas blancas y a los tiros con una facción de la barra denominada “Los de Palermo”, la cual estaba encabezada por los hermanos Alan y Willian Schlenker.
Según la investigación, en el primer grupo se encontraba Acro, quien en agosto de ese mismo año fue asesinado a balazos en el barrio de Villa Urquiza y por cuyo crimen ya hubo dos juicio orales, y en el segundo habrían estado “Rocky” Raposo y Aguirre.
De acuerdo a la investigación de la Fiscalía de Distrito Núñez-Saavedra, los agresores estaban vestidos con prendas de color negro y con sus caras tapadas por pasamontañas, y habían llegado al estadio a pie luego de estacionar sus vehículos en Ciudad Universitaria.
De hecho, los pesquisas identificaron allí el Chevrolet Corsa de Goñi y el Ford Orion de Pineda a través de los registros fílmicos.
Además, en la casa de Rousseau se secuestró un cuchillo tipo “Tramontina” con restos de sangre y en el domicilio de Goñi se incautó una pistola Bersa Thunder 9 milímetros que se correspondió con una de las vainas servidas encontradas en el playón.
