Creen que el violador de Caballito conocía muy bien el barrio

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Antes de abusar de la joven que había maniatado, la dejó en la entrada de la cochera que había elegido para violarla y se fue hasta la esquina de Víctor Martínez y Hualfin para comprobar que el policía de la comisaría 12» que estaba como consigna hasta las 3 se había retirado.

Luego, regresó hasta el edificio de Hualfin 952, en Caballito, y violó a su víctima, de 18 años. Después de abusar de la chica, huyó hacia la zona de Primera Junta. Según publica el diario La Nación, en la puerta de la cochera, en medio de la oscuridad, quedó la víctima en estado de shock, con las manos atadas con un cinturón y con cinta adhesiva transparente. Ya no tenía fuerzas para luchar. Sus gritos fueron ahogados por el hombre que la violó y le tapó la boca con una cinta.

En su ropa quedaron restos de semen del agresor. Los médicos que la atendieron siguieron el protocolo para casos de violación y tomaron muestras de las prendas de la víctima para obtener un ADN que será cotejado con el perfil genético del eventual sospechoso.

Ayer, la policía encontró una imagen grabada por una cámara de seguridad de un comercio de Emilio Mitre entre Rivadavia y Hualfin. Si bien la filmación no resultaba muy clara, los investigadores de la comisaría 12» esperaban poder mejorar la calidad de la grabación para obtener el rostro del agresor. Esa imagen será comparada con la descripción de un sospechoso denunciado hace 20 días que fue visto merodeando en cerca de dos colegios de la zona.

Luego de desatarse, la víctima fue a la casa del familiar donde se quedaba a dormir cuando salía tarde de trabajar y a la comisaría 12» para hacer la denuncia. Allí aportó una descripción del agresor.

Según relató a los policías, el violador tenía entre 45 y 55 años, vestía una campera del seleccionado argentino, un pantalón de jogging oscuro y una mochila negra. Además, no usaba guantes.