Un acalarodado debate, con acusaciones recíprocas, vivió el plenario del Consejo de la Magistratura cuando la mayoría logró imponer su criterio y apartar a tres de los seis miembros del Cuerpo de Auditores del Consejo de la Magistratura entre ellos al titular Jorge Meydac.
El Cuerpo de Auditores está encargado de, justamente, auditar los juzgados no sólo en su productividad en la legalidad y administración financiera. Fue este punto donde la oposición vio un avance del oficialismo sobre la independencia judicial.
Fuentes consultadas del oficialismo negaron las acusaciones y señalaron que la decisión de remover a los auditores se debió a su “baja productividad”. Aclararon que dos de los cinco miembros quedaron en sus cargos que solo se eligió una nueva persona y que falta aún designar al titular y otros de los cargos ahora vacantes.
El diputado nacional radical Gustavo Valdés, integrante del Consejo, la calificó como “un avasallamiento a la independencia judicial”. Para el legislador correntino, el oficialismo busca “la creación de un cuerpo de policía con auditores oficialistas para presionar a los jueces que investiguen casos de corrupción sobre algunos funcionarios”.
El Cuerpo de Auditores está bajo la órbita de la Magistratura desde 2008. Su función es la de asesorar al plenario del organismo en lo relativo a la auditoría de juzgados y cámaras de apelaciones. Hasta ahora se auditaba por pedido del Consejo, pero hoy se aprobó también que puedan ser también de oficio.
Tiene competencia para ejercer el control interno, mediante auditorías contables, financieras, de gestión y de legalidad de los jueces del Poder Judicial de la Nación y del Consejo de la Magistratura.
