En el marco de la causa que investiga la fiscal Nacional en lo Criminal y Correccional 39, Paula Asaro, y la jueza de Instrucción 6, María Alejandra Provítola, se manejan dos hipótesis en torno al hecho: una disputa entre grupos de ese asentamiento por la construcción de una obra o un enfrentamiento vinculado a la barra brava de un club local, detallaron los voceros.
Los procedimientos estuvieron a cargo de efectivos de la División Homicidios de la Policía de la Ciudad y dos de ellos se realizaron dentro de la villa Zavaleta.
Uno fue en un domicilio de la calle Zavaleta al 1100, donde se secuestraron 10 cartuchos calibre 9 milímetros y dos calibre 45, además de una constancia de soltura desde la alcaidía de General Madariaga de la Policía Federal Argentina a nombre de la persona buscada, con fecha del 30 de noviembre último, detallaron las fuentes.
También se secuestraron un pendrive y un teléfono celular que serán peritados.
Los informantes dijeron a Télam que luego se allanó otro domicilio del mismo asentamiento y por último un obrador ubicado sobre la avenida Vélez Sarsfield, entre Aráoz de Lamadrid y Toll, a metros de donde se produjo el crimen de Abraham Brian Robles Escudero (30), aunque en ninguno de los procedimientos se pudo localizar a “Chavo”.
Un investigador confirmó a Télam que hay dos pistas que se siguen en torno al ataque: una disputa vinculada al liderazgo de la barra del club Barracas Central y otra relacionada a un enfrentamiento por la construcción de una obra en la villa Zabaleta.
El crimen de Robles Escudero fue cometido ayer en avenida Vélez Sarsfield y Gregorio Aráoz de Lamadrid, en la zona sur de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires.
Efectivos de la Comisaría Vecinal 4D escucharon detonaciones y al aproximarse al lugar hallaron a Robles Escudero inconsciente en el suelo con al menos un disparo de arma de fuego en la espalda y a unos metros a otro hombre, de 28 años, con una herida de bala en la pierna derecha.
Según las fuentes, ese herido fue subido a un Renault 9 y llevado por un vecino de la zona al hospital Penna, donde recibió las primeras curaciones, mientras que Robles Escudero fue trasladado por una ambulancia del Servicio de Atención Médica de Emergencias (SAME) al mismo centro de salud en el que murió pese a las tareas de reanimación que le practicaron.
De acuerdo con los voceros consultados, el fallecido tenía antecedentes por delitos menores y por violencia de género.
Testigos del ataque señalaron que los disparos fueron realizados por un hombre que descendió de un Peugeot 208 color rojo y que huyó tras disparar.
“Los atacaron desde un auto. En el lugar encontraron cuatro vainas servidas”, aseguró a Télam un encargado de la investigación.
Según pudo reconstruir el pesquisa, junto a ambas víctimas se encontraban reunidas otras seis personas que escaparon luego de escuchar las detonaciones.
