Triplican la recompensa para dar con el prófugo del crimen de Klodczyk

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El Ministerio de Seguridad de la Provincia de Buenos Aires elevó a 150 mil pesos la recompensa para dar con el delincuente que se encuentra prófugo por el crimen del subcomisario Juan Carlos Klodczyk.

Daniel Alejandro Vicente Pezzo es buscado desde agosto del año pasado, diez meses después de haber sido condenado como coautor de “homicidio simple”.

En un primer momento se solicitó información a cambio de 50 mil pesos, pero en las últimas horas la cartera de seguridad resolvió triplicar el pedido para poder ubicarlo.

El crimen de Klodczyk (41) ocurrió el 12 de diciembre de 2011, cerca de las 12.30, cuando el subcomisario acompañó al banco a su tía Alicia, viuda del ex jefe de la Policía Bonaerense Pedro Anastasio Klodczyk, muerto en 2000 tras una enfermedad.

La mujer retiró 12.000 pesos de su pensión y luego ella y su sobrino fueron a almorzar a la parrilla “Diógenes”.

Tras estacionar el auto, ambos descendieron y caminaron hacia el local, situado en Esquiú y avenida Perón, de Lanús, donde tres hombres armados descendieron de una Chevrolet Meriva y de una moto e interceptaron al subcomisario, que estaba vestido de civil.

Mientras la tía, que llevaba el dinero, salió corriendo rumbo a la parrilla, el efectivo se resistió al robo al dar la voz de alto, y los delincuentes le dispararon en la cabeza, espalda y brazo y luego lo remataron en el piso.

Finalmente, los ladrones escaparon sin robar nada a bordo de la moto, conducida por un cómplice y, en el auto, durante la fuga, uno de los delincuentes gritaba: “Lo pusimos…lo pusimos!, mientras todos reían a carcajadas.

Al momento de su muerte, la víctima prestaba servicios en la comisaría séptima de Villa Industriales, en Lanús, y si bien en un principio se creyó que su asesinato podría haber estado relacionado con su trabajo o el de su tío, luego se descartó.

Los hermanos Vicente llegaron al juicio oral en calidad de detenidos en junio del 2014, pero la fiscal Marcela Dimundo consideró que las pruebas recolectadas en el debate no eran suficientes y no los acusó, por lo que quedaron libres.

El fallo absolutorio fue apelado por la familia de la víctima y en septiembre de 2015 la sala I del tribunal de Casación anuló el fallo y ordenó que el mismo tribunal los condene por “homicidio simple”.