La investigación comenzó el año pasado con la denuncia de vecinos por la venta de droga en el barrio. A partir de tareas de campo y seguimiento se pudo dar con el líder de la banda. Apodado “El Borrego” por su contextura física, de nacionalidad peruana, manejaba el fraccionamiento y distribución de cocaína en la Villa 31.
En el momento de los allanamientos “El Borrego” se encontraba en su domicilio donde fue detenido junto a su mujer. A 100 metros de su casa funcionaba el lugar donde se cortaba y fraccionaba la droga. Esta tarea estaba a cargo de mujeres. Al revisar el sitio se encontraron bolsas de cocaína que estaban siendo divididas en dosis. También un cuaderno con anotaciones de las cantidades vendidas.
En otra vivienda al lado del domicilio del líder se halló más droga escondida en el freezer junto a elementos de corte. Debajo de la casa de “El Borrego” funcionaba un bar en el que se vendía parte de la droga. Al inspeccionar el local se halló un arma oculta en el baño.
En el pasillo lindante a la casa del líder y que se comunicaba con los otros dos domicilios allanados, se encontraron dosis de cocaína escondidas detrás de un santuario de San La Muerte.
El lugar era utilizado por los vendedores para no llevar la droga encima y evitar ser descubiertos en caso de que la policía los requisara. Dos de los dealers fueron detenidos al ser descubiertos infraganti comercializando la cocaína.
En total fueron detenidas diez personas, de entre 21 y 45 años, que formaban parte de la banda narco. Se secuestraron 165 envoltorios con cocaína, cuatro bolsas de nylon con la misma sustancia, tres balanzas de precisión y una pistola calibre 32.
El operativo fue realizado por la División Investigación Antidrogas Norte de la Policía de la Ciudad. Intervino el Juzgado Penal Contravencional y de Faltas N°28, a cargo de la Dra. Correa.
