Crimen en Las Cañitas: buscan al “hombre del casco” como principal sospechoso

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La fiscalía que investiga el homicidio de la docente jubilada de 79 años, asesinada el domingo pasado aparentemente asfixiada con una almohada en su departamento de la zona de Las Cañitas, rastreaba la pista económica en el crimen, a raíz de la supuesta venta de un departamento por parte de la víctima hace unos meses, mientras intenta identificar al hombre que portaba un casco de moto que fue registrado en las cámaras de seguridad saliendo del edificio en el que se produjo el hecho, informaron fuentes policiales y judiciales.

La muerte de Tatiana Konovnitzine (79) fue descubierta el domingo a la noche en su departamento del quinto piso de un edificio ubicado sobre la avenida Luis María Campos 831, entre el pasaje Volta y Jorge Newbery, luego de que una de sus cuidadoras, de nombre Milagros, denunciara que la jubilada era víctima de un robo en el que a ella también la tuvieron retenida durante unos 40 minutos.

Al respecto, los investigadores ya cuentan con los registros de nueve cámaras de seguridad del edificio, en una de las cuales ubicada en el hall de entrada se observó que a las 17.32 de ese domingo -la probable hora del crimen-, un hombre con un casco de moto y varios bolsos colgando salía del inmueble.

En ese sentido, los investigadores señalaron que intentan identificar al sospechoso a través de las filmaciones de las zonas aledañas al edificio para tratar de reconstruir cómo ingresó al domicilio y hacia dónde se dirigió luego de salir del mismo.

“Se incrementó el pedido de cámaras, dado que desde que salió por los medios el video del hombre del casco, tuvimos que darle gran importancia, por ende, procurar encontrar todo su recorrido”, dijo a la agencia Télam una fuente con acceso a la causa.

Por otro lado, otras fuentes de la investigación señalaron a esta agencia que también se está investigando si la mujer de 79 años había vendido hace unos meses un departamento ubicado sobre la calle Blanco Encalada, en el barrio de Belgrano, y saber quién de su entorno conocía ese dato.

Además, los informantes indicaron que en las últimas horas una mujer identificada como Patricia Mendoza (60) se presentó ante la Justicia como apoderada de la fallecida y les explicó a los investigadores que Tatiana tenía dos cuidadoras.

La mujer, quien es empresaria y hermana del bailarín y productor Flavio Mendoza, refirió que ambas asistentes de Konovnitzine tenían la llave de su domicilio, a la vez que explicó que una de ellas iba de lunes a viernes, mientras que Milagros lo hacía los fines de semana.

Por otra parte, a la espera de la autopsia, la fiscalía recibió un informe de la Unidad Criminalística Móvil (UCM) de la Policía de la Ciudad con los primeros datos forenses, los cuales arrojaron que el cuerpo de la víctima “poseía signos de violencia en la parte interior de los labios y hematomas en la clavícula”, lo cual infirió que fue golpeada antes de su deceso.

A su vez, ese reporte también dio como posible causa de muerte una “asfixia”, aunque esto deberá corroborarse en el trabajo de la morgue.

Voceros de la investigación indicaron a Télam que también “se está llevando a cabo un censo en el edificio” para identificar a cada uno de los habitantes del inmueble.

“Seguimos recolectando testimonios de vecinos. Queremos saber quiénes son propietarios y quiénes inquilinos. Eso también está iniciado, pero todavía no tenemos los resultados”, señaló un investigador.

El hecho ocurrió el domingo último, alrededor de las 17, aunque fue descubierto tres horas más tarde en un departamento del barrio de Palermo, ubicado sobre la avenida Luis María Campos 831, en la zona de Las Cañitas.

De acuerdo a las fuentes, todo comenzó cuando una mujer que trabaja en ese domicilio como cuidadora de la fallecida, quien se identificó con el nombre Milagros, se presentó en la sede de la Anexo de la Comisaría Vecinal 13B de la Policía de la Ciudad.

Allí, denunció que horas antes había ido a cumplir con su trabajo y se había encontrado en ese domicilio con un hombre que mantenía maniatada y reducida a su empleadora.

Según la versión de esta mujer, el delincuente, mayor de edad, de 1,70 metros de estatura y que vestía remera blanca y llevaba guantes, la redujo también a ella por un lapso de 40 minutos, hasta que le permitió retirarse del lugar.

De acuerdo con la empleada, por el estado de nerviosismo que se encontraba, primero fue a su domicilio en la calle Fray Justo Santa María de Oro al 2400 de Palermo, a unas quince cuadras de donde cumple su tarea, y recién después hizo la denuncia policial.

A partir de sus dichos de Milagros, quien también dijo ser amiga de la víctima, personal policial de la Comisaría Vecinal 14B, con jurisdicción en Las Cañitas, concurrió al departamento de la avenida Luis María Campos y allí encontró muerta a la propietaria, tendida en el suelo en la zona del comedor y con una almohada que le cubría el rostro.

Al lugar arribó una ambulancia del SAME cuyo personal médico constató el fallecimiento de Konovnitzine.

Por otro lado, se pudo observar en las cámaras de seguridad del edificio que a las 16.18 la víctima salió a pasear a su perro y regresó 12 minutos más tarde.

Además, los investigadores pudieron determinar que un sospechoso salió del edificio a las 17.42 con varios bolsos colgados, a la vez que contaba con un casco de moto que le permitió ocultar su rostro de las cámaras.

Por último, los investigadores determinaron que la puerta de ingreso tiene una traba electrónica, es decir que el homicida logró ingresar porque tenía en su poder el clip con el que se habilita el acceso, o bien entró al edificio junto a otro vecino.