La causa está en manos del titular del Juzgado Nacional de Menores 4, Alejandro Rodolfo Cilleruelo, y de la fiscal del mismo fuero, María Fernanda Poggi, porque, en un primer momento, la Policía de la Ciudad comunicó el hecho como una persecución a presuntos delincuentes y entre ellos había menores de edad detenidos.
Con el correr de las horas y luego de que la investigación y las denuncias de los familiares de los adolescentes comenzaran a poner el foco en lo irregular del procedimiento de los efectivos de la Policía de la Ciudad, que actuaron incluso de civil, el mismo juez Cilleruelo liberó a los tres acompañantes de González que permanecían detenidos en el Centro de Admisión y Derivación (CAD) (ex Instituto Inchausti) del barrio porteño de Congreso.
Fuentes judiciales explicaron a Télam que todo indica que, a partir de que quede esclarecido que los adolescentes no cometieron ningún delito, Cilleruelo debería declararse incompetente y derivar la causa al juez y al fiscal del fuero penal de mayores que estaban de turno el día del hecho en la zona de Barracas.
Ese juzgado es el Criminal y Correccional 7, a cargo del juez Martín Carlos Del Viso, y la fiscalía, la número 32, a cargo de Leonel Gómez Barbella, quienes, hasta esta mañana, no habían recibido ninguna notificación del juez de Menores de que les delegaba la causa.
Lo cierto es que hasta esta mañana, el juez Cilleruelo no había tomado ningún temperamento con los tres policías porteños implicados, que son el inspector Gabriel Isassi, el oficial mayor Fabián López y el oficial José Nievas, quienes ya fueron sumariados y pasados a disponibilidad por el Ministerio de Justicia y Seguridad porteño.
“No están detenidos ni se emitió todavía ninguna orden de detención contra ellos”, dijo a Télam una calificada fuente de la investigación.
Incluso, en su carácter de ministro de Justicia y Seguridad, Marcelo D’Alessandro, le envió anoche un escrito al juez Cilleruelo –al que accedió Télam-, en el que le informa la situación del pase a disponibilidad de los policías y le indica que “resulta imprescindible proceder a la adopción de medidas urgentes respecto de la situación procesal” de los oficiales Isassi, López y Nievas.
La Policía Federal Argentina, fuerza que interviene desde el inicio en las actuaciones de este expediente, aguardaba desde ayer alguna determinación del juzgado actuante en relación a los policías y se esperaba que esta mañana la causa sea delegada a los detectives de la División Homicidios de la fuerza federal.