Detectives del Departamento Delitos Federales realizaron un análisis de las nuevas modalidades y rutas del contrabando, determinando que especialmente aquella mercadería proviene de los países limítrofes del Noreste de la República Argentina, la cual se envía a esta Ciudad de Buenos Aires, mediante expresos, luego de lo cual se redistribuye en diferentes mercados irregulares tanto de esta Ciudad, como también del Conurbano Bonaerense y del interior del país.
Siguiendo estas directrices los detectives procedieron a implantar diversos controles en rutas y lugares predeterminados, especialmente donde se observa la carga y descarga de los mercadería.
En la localidad de Los Polvorines, provincia de Buenos Aires, los efectivos observaroel desplazamiento de un camión y una camioneta, en una de las vías principales de circulación.
Ambos poseían mercaderías de origen importado consistente en 70 jarros de vidrio, 200 tazas de cerámica, 250 platos hondo, 150 platos playo, 100 juegos de te, 80 escurridores plata, 70 pavas enlosadas, 50 pavas de acero, 70 pavas eléctricas, 60 juegos de ollas, 2000 pares de zapatillas, 200 camperas, 500 toallones, 800 frazadas, 350 mochilas, las cuales carecian de toda documentación que ampare el legal ingreso al país y diferentes permisos impuestos por la Legislación Argentina para la Seguridad Electrica, habiendo eludido, los debidos controles de los organismos respectivos, poniendo en peligro la salud de la población, en especial la de aquellas de bajos o escasos recursos. Continuando ademas, con la misión de de velar por la defensa y protección de la Industria Nacional Argentina y la Salubridad Pública.
A raíz de este procedimiento, tomo conocimiento el Juzgado Nacional en lo Penal Economico Nro. 8 del Dr. Gustavo Meirovich. La mercadería secuestrada por personal de la Dirección Generla de Aduana alcanzó un valor en plaza de 800.000 pesos argentinos.
