Un joven de la comunidad gitana con retraso madurativo fue secuestrado en la puerta de su casa de la localidad bonaerense de Lomas del Millón, partido de La Matanza, y liberado tres horas después en el barrio porteño de Mataderos, informaron hoy fuentes judiciales y policiales.

El hecho ocurrió anoche alrededor de las 22 y, durante el cautiverio, los delincuentes se comunicaron con la familia de la víctima para exigir un rescate, aunque los voceros y la familia confirmaron que no se consumó el pago.

Según los informantes, el joven, de 18 años, fue subido anoche a un auto cuando estaba en la vereda de su casa, tras lo cual comenzó a ser “paseado” por el barrio por los captores, quienes le quitaron su teléfono celular y llamaron a su familia para pedir dinero por su liberación.

Al respecto, Emilio, tío de la víctima, relató a la prensa que el muchacho estaba en la puerta de la vivienda y apareció “un coche blanco con tres personas, lo cargaron y se lo llevaron a Mataderos”.

Fuentes policiales dijeron a Télam que el padre del joven recibió un llamado vía Nextel en el que le exigieron que entregara 200.000 pesos.

Sin embargo, los familiares no pudieron recolectar esa suma y se dirigieron a la comisaría de su zona, tras lo cual el teléfono del que lo habían llamado comenzó a aparecer apagado.

“Estaban buscando a un gitano que tenía una moneda de oro estrella (colgada en su cuello)”, afirmó el hombre, quien negó que los captores sean conocidos de la familia.

Unas tres horas después, los delincuentes lo liberaron en el cruce de las avenidas Juan Bautista Alberdi y General Paz, frente a una casa de comidas rápidas.

Un vocero judicial informó a Télam que fue un tío del joven quien lo fue a buscar allí y lo trasladó hasta su casa, luego de lo cual sus padres lo llevaron a la seccional de Lomas del Millón para radicar la denuncia.

“Lo largan y se vino caminando desde allá, porque ya conocía, hasta la casa y la familia lo buscaba por todos lados pero no lo encontraban”, contó Emilio, el cual aseguró que “no se pagó nada” por la liberación del joven.

Una fuente policial señaló que se trató de un “hecho confuso” y que los integrantes de la familia dieron una versión distinta de lo sucedido.

La investigación está a cargo de la DDI de La Matanza y de la Fiscalía Federal 2 de Morón, encabezada por Carlos García, que analizaba las cámaras de seguridad de la zona con el fin de identificar a los delincuentes.

Los pesquisas procuraban establecer si el secuestro fue al azar o si existe algún conflicto entre familias de la misma comunidad, añadieron los voceros.

No obstante, la causa está por el momento caratulada como “secuestro extorsivo”.