Marcelo Sergio Villalba, uno de los detenidos por el crimen de Anahí Benítez en Lomas de Zamora, se negó a declarar hoy en la causa en la que está imputado por haber manoseado a una mujer en la avenida Carlos Pellegrini, a ocho cuadras del Obelisco porteño, tres meses antes de que se produjera el femicidio, informaron fuentes judiciales.
El acusado fue trasladado este mediodía a los tribunales de Comodoro Py 2002, donde el juez de instrucción Luis Zelaya encabezó la audiencia en la que se lo acusa del delito de “abuso sexual simple”, que tiene una pena de seis meses a cuatro años.
Por recomendación de su defensa oficial, Villalba (40) se negó a ser interrogado y ahora Zelaya, que subroga el juzgado de instrucción 44, con sede en los tribunales de Retiro, resolverá su situación procesal en los próximos 10 días.
Esta causa se conoció a partir de lo que la propia víctima, Katia Documet Silva, publicó en Facebook el 2 de septiembre en un posteo que tituló “Anahí estaría viva si la Justicia hubiese reaccionado adecuadamente ante el aviso”.
“El 20 de abril de 2017, aproximadamente a las 12.30, mientras caminaba por la calle Carlos Pellegrini al 1200, a pocos metros de la esquina con Juncal, en dirección a Arenales, se me acercó un individuo que, con una manifiesta intención lasciva, puso fuertemente su mano derecha en mi cola”, señaló la mujer, que es de nacionalidad peruana, pero vive en Buenos Aires junto a su marido, que es abogado.
Documet Silva contó que ella reaccionó “a carterazos” y que todo fue observado por “una mujer policía llamada Sandra Cantero”, a quien le está agradecida porque a pesar de que Villalba trató de escapar hacia la avenida 9 de Julio, logró reducirlo y detenerlo.
La mujer contó que en la comisaría 15 formalizó la denuncia, que allí dejó constancia de que instaba la acción penal y que incluso se constituyó como parte querellante en el proceso por “abuso sexual”.
La víctima destacó que en la comisaría “se tomaron todos los recaudos para las cuestiones de género”, ya que nunca la cruzaron con el imputado y siempre fue atendida por personal femenino, pero criticó lo que sucedió al otro día en el Palacio de Tribunales.
“Me hicieron sentir que los estaba molestando por una pavada. Ninguna consideración por la cuestión de género. Me cruzaron tres veces con el agresor (a pesar de haber pedido expresamente no cruzármelo) que hasta se fue en libertad antes que yo terminara de hacer los trámites y pasó por al lado mío con una sonrisa altanera”, explicó.
La víctima remarcó que ella les advirtió a la fiscal y al juez que “una persona que no lograba contener la pulsión en la esquina de Juncal y Carlos Pellegrini, a las 12 del mediodía, delante de todo el mundo, contra una mujer grande ¿qué haría con una niña si se la encuentra sola y de noche? ¡La viola y la mata!”.
“Bueno, resulta que Marcelo Sergio Villalba, el mismo que estoy querellando por abuso sexual por esta agresión que les relato, está ahora comprometido, tres meses después, por pruebas que lo vinculan con la violación y homicidio de Anahí Benítez”, indicó Documet Silva.
Anahí Benítez fue hallada asesinada el 4 de agosto en la reserva Santa Catalina de Lomas de Zamora y Villalba fue detenido y luego se le dictó la prisión preventiva por “privación ilegal de la libertad, abusos sexual agravado y homicidio triplemente calificado por criminis causa -matar para ocultar otro delito y lograr la impunidad-, por alevosía -por el estado de indefensión de la víctima-, y por violencia de género”.
El otro detenido en esa causa es Marcos Bazán (34), a quien se le imputan los mismos delitos excepto la violación.
