El suspendido jefe de la Policía de la Ciudad, comisario general José Pedro Potocar, quedó detenido esta mañana en los tribunales porteños tras presentarse espontáneamente ante el juez porteño Ricardo Farías, quien tiene a su cargo la investigación por el supuesto pago de coimas por parte de comerciantes a los policías de la comisaría 35a.

Potocar, tras ser notificado de su detención apenas llegara a la oficina del juez Farías, quien lo imputó de los delitos de “cohecho” y “asociación ilícita” en calidad de jefe, se negó a declarar y se remitió al escrito que acababa de presentar.

El suspendido jefe policial había llegado a los tribunales cerca de las 9 de esta mañana acompañado por sus abogados Christian Poletti y Raúl Alcande, con la intención de hacer una presentación espontánea a raíz de los trascendidos sobre su situación judicial.

Sin embargo, una vez en el despacho del juez se enteró que ya estaba firmada su orden de detención, por lo que quedó apresado.

El magistrado había hecho lugar al pedido de detención que había formulado el miércoles de la semana pasada el fiscal de instrucción José María Campagnoli, quien instruye el expediente en el que se investiga la supuesta recaudación ilegal y brindar protección a los denominados “trapitos”.

En la indagatoria, Potocar se remitió al escrito que acababa de presentar de manera espontánea.

Fuentes judiciales dijeron que el jefe policial se negó a declarar, pero su abogado defensor Christian Poletti explicó a Télam que “se ofreció a contestar todas las preguntas, pero nadie le preguntó nada”.

“Había más circo mediático que otra cosa por parte de la fiscalía. La imputación no lo toca ni cerca”, dijo el letrado, quien adelantó que esta misma tarde pedirá la excarcelación de Potocar.

Por su parte, el juez Farías fundamentó el pedido de detención de Potocar porque el monto de la pena que podría corresponderle por los delitos que se le atribuyen podría hacer presumir que no acudiría a una citación.

Potocar “fue para entregar un escrito con un descargo parcial, como lo prevé el Código Procesal Penal, y le comunicaron que quedaba detenido”, indicó una fuente vinculada a la defensa del policía.

Según las fuentes judiciales, Potocar quedará detenido en el Edificio Centinela de Gendarmería Nacional, a la espera que se resuelva su situación procesal.

El fiscal Campagnoli investiga si policías de la seccional 35ª. exigían sumas de dinero a cambio de brindarles “seguridad” a comerciantes de los barrios de Núñez y Saavedra de esta capital, y la supuesta protección a “trapitos” para que pudieran trabajar en la zona sin inconvenientes, a cambio del pago de una suma de dinero.

En esta causa, el 12 de abril último, el juez Farías procesó y embargó por 350.000 pesos a la comisaria inspectora Susana Aveni como “jefa u organizadora” de la asociación ilícita y al subcomisario Marcelo Stefanetti como miembro.

La oficial era la superior directa del aún prófugo comisario Norberto Villarreal quien -según la investigación de Campagnoli- le ordenaba a los policías de la brigada de su seccional pedir dinero a comerciantes a cambio de “seguridad privilegiada” y también extorsionaban a “trapitos”.

El 28 de marzo último, en el marco de esta misma causa, también fueron detenidos los subcomisarios Stefanetti, que se desempeñaba en la División Comando y Control del 911, y Hernán Kovasevich, de la División Antidrogas Especiales.

Ese día también quedó prófugo, al igual que Villarreal, otro subcomisario identificado como Alberto Codaro.

En tanto, el juez Farías detuvo y luego procesó con prisión preventiva en noviembre último al sargento primero Adrián Otero, al cabo Alejandro Malfetano, al sargento Sergio Ríos y al suboficial escribiente Marciano Quiroga también por “asociación ilícita”.