Confirman procesamiento de un policía que mató a un inocente persiguiendo a un ladrón

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La Cámara del Crimen confirmó el procesamiento de un cabo de la Policía Federal acusado de matar de un balazo a un vecino del barrio porteño de Mataderos que arreglaba su auto en la vereda, en el marco de la persecución a ladrones, aunque al mismo tiempo dispuso su excarcelación.

Se trata del cabo Diego Hernán Palermo, acusado por la muerte de Jonathan Echimborde, de 28 años y padre de tres niños.
El 27 de diciembre pasado, el joven estaba arreglando su camioneta en la puerta de su casa, en Basualdo al 1600, cuando recibió un disparo en el pecho.

La Sala Cuarta del tribunal ratificó el procesamiento dictado en febrero pasado por el juez Pablo Ormaechea por el delito de “homicidio agravado”, y el embargo sobre sus bienes hasta cubrir la suma de un millón de pesos.

El fallo de la Cámara, además, dispuso la excarcelación de Palermo, bajo una caución de 20 mil pesos.

Según consta en la causa judicial, un llamado al teléfono de emergencias 911 alertó sobre un robo y un móvil de la comisaría 42 salió en persecución de un Volkswagen Bora, en el que se desplazaban los sospechosos.

Durante el trayecto, a la altura de la calle Basualdo al 1600, un policía efectuó al menos 11 disparos, uno de los cuales impactó en Echimborde (empleado de una fumigadora y completamente ajeno a la situación delictiva), quien murió mientras era trasladado a un hospital.

La Cámara, con las firmas de los jueces Alberto Seijas y Carlos Alberto González, evaluó que el policía Palermo disparó reiteradamente “desde un vehículo que circulaba a elevada velocidad, por diferentes arterias en plena zona urbana, con personas transitando por las calles recorridas durante la persecución, en un horario vespertino”.

“Si aun representándose que un tercero pudiera ser alcanzado por alguno de los proyectiles lanzados frenéticamente por él (Palermo), igualmente decidió continuar con su plan aceptando esa posibilidad”, entonces debe “achacársele” el delito de “homicidio agravado”, que contempla como pena única la prisión o reclusión perpetua.