Memoria Activa: Sobre la apertura de la denuncia de Nisman

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Tras la decisión de la Cámara Casación Penal de reabrir la denuncia por encubrimiento a Irán, que presentó el ex fiscal de la causa AMIA, queremos expresar nuestra sorpresa respecto al empeño que algunos medios de comunicación, los dirigentes políticos, la corporación judicial y sobre todo los representantes de la DAIA y la AMIA han puesto en este tema.

En más de 22 años de investigación y lucha de los familiares y amigos de las víctimas, jamás vimos a estos actores poner energía en el esclarecimiento del atentado y en la condena a quienes se ocuparon de desviar la investigación, algunos de los cuales están hoy siendo juzgados en un juicio oral y público por encubrimiento que nadie difunde, apoya o promueve.

Por el contrario, la dirigencia comunitaria continúa defendiendo visiblemente a su ex presidente, Rubén Beraja, quien comparte el banquillo con 13 acusados en el juicio.

De hecho, hemos visto desfilar a varios ex dirigentes de la DAIA por Comodoro Py, en apoyo a Beraja, al ex juez de la causa Juan José Galeano y a los ex fiscales Eamon Mullen y José Barbaccia.

Como si esto fuera poco, la querella que representa a la AMIA y a la DAIA en el juicio (que por supuesto no incluyó en su acusación a Beraja y a los ex fiscales) se muestra, con escasas intervenciones en el debate, a favor de la defensa del ex presidente de la DAIA y en contra de las querellas.

Causa desfiscalizada

Consideramos que el fallecimiento del ex fiscal de la causa debe investigarse seriamente. Sin embargo, dadas las circunstancias, no podemos dejar de mencionar y recordar que la actuación de Nisman al frente de la Fiscalía Especial AMIA resultó bochornosa y la hemos repudiado desde hace tiempo (nuestros comunicados al respecto y pedidos de destitución, pueden encontrarse en esta web).

En más de 10 años como fiscal, Nisman no obtuvo logros en la investigación sino que, como hemos expresado en varias oportunidades en el pasado: “viaja mucho y trabaja poco”.

Nuestras denuncias terminaron de comprobarse con la información que surgió tras su muerte y con el trabajo de los ahora integrantes de la UFI-AMIA. Estos fiscales, por ejemplo, debieron realizar peritajes que nunca se habían hecho, identificar a una víctima que no se había identificado, pedir documentación sobre el atentado a diversas fuerzas de seguridad e inteligencia que no se había pedido, y la lista sigue.

Desde MEMORIA ACTIVA buscamos la verdad y la justicia siempre. Es por esto que nos vuelve a sorprender, nos preocupa y repudiamos, una vez más, el uso y abuso político y judicial de los muertos de la AMIA.

Justicia, justicia perseguiremos.