Todo comenzó con una charla de Facebook entre un joven de 17 y una chica de 14 años. El vínculo virtual –él desde Mayor Buratovich y ella desde Hilario Ascasubi– duró meses y luego pasó a un chat de WhatsApp. Más allá de un encuentro real ocasional, maduró a la distancia, la de los 15 kilómetros que separan a ambos pueblos, a la vera de la ruta 3. Luego, la viralización a través de las mismas redes de una foto de ella desnuda escandalizó en silencio a las pequeñas localidades de la zona sur de Villarino y se expandió a otros pueblos del distrito. Hasta que el caso llegó a la justicia y trascendió.
El 18 de mayo, la madre de la chica radicó una denuncia, tras contar lo ocurrido en la escuela de su hija.
“A los pocos días de que se viralizara la imagen, recibió un mensaje en el que le exigían 1.000 pesos para conseguirle la foto, a lo que ella accedió y pagó”, reveló el secretario de Seguridad de Villarino, Federico Montero.
Con el aporte del chat de WhatsApp, en el que se pactó la entrega y otros datos, la policía realizó dos allanamientos el miércoles, uno en Buratovich, donde vive el joven que tuvo la relación con la menor y otro en Ascasubi. En este último fue arrestada una pareja. “Se trata de la mujer que le ofrece la foto a cambio del dinero a la madre de la niña y al concubino que la tenía en su celular”, reveló el funcionario.
Una fuente de la fiscalía de Delitos Sexuales de Bahía Blanca aseguró que no se trata de la foto original. Allí la causa está caratulada como grooming y distribución de pornografía infantil, mientras se investiga la posible extorsión.
Aun no se pudo determinar si existe un vínculo entre el menor y la pareja detenida y cómo se inició la propagación viral de la imagen íntima de la chica, que en febrero pasado cumplió 15 años. Según fuentes familiares, quedó muy afectada por la exposición y desde el municipio tuvieron que acercarle ron contención psicológica.
A través de su propio perfil de Facebook, la acusada de extorsionar a la familia de la nena, se defendió y dijo que en realidad cayó por intentar ayudar. “Cuando se enteraron que circulaba una foto desnuda de su hija (6 o 7 meses después) se acercaron a mi casa, ella llorando, me pide que la ayude”.
Según posteó ayer, les consigue la foto (“todo el mundo la tiene”, acota) y a cambio, por el favor, le dieron 1.000 pesos “para que compre mercadería y pañales” y a los dos días le llevaron carne. “Ayer a la tarde, estábamos por terminar de almorzar… y me llegan 8 oficiales a mi casa y me empiezan ( sic) a tratar como si fuera una asesina. Me revolvieron todo! Mis 3 hijos lloraban!”, se quejó la mujer, quien identificó a los padres de la supuesta menor víctima como los abuelos de sus dos hijos mayores.
