Un hombre fue encontrado asesinado de once puñaladas y con el rostro cubierto con diarios en el living de su departamento del barrio porteño de Almagro, informaron fuentes policiales.

Se trata de un hombre identificado por la policía como Héctor Carlos Santulli (69), cuyo cadáver fue hallado el viernes por la noche en su departamento del octavo piso del edificio ubicado en la calle Castro Barros 10, a metros de la avenida Rivadavia.

Según las fuentes, el hecho fue descubierto por un amigo de Santulli, que había acordado encontrarse a cenar esa misma noche. El hombre, al no recibir respuesta a los reiterados llamados telefónicos, decidió dirigirse al departamento de Santulli.

Fuentes policiales dijeron a Télam que el amigo de Santulli tenía un juego de llaves del departamento de su amigo, por lo que ingresó y lo encontró asesinado.

Santulli se hallaba recostado sobre un sillón del living y estaba completamente desnudo, dijeron los investigadores, quienes agregaron que tenía el torso y la cara tapadas con hojas de diarios.

De inmediato, el hombre llamó al 911 y un patrullero de la comisaría 10a. se dirigió al lugar y los policías constataron el crimen. Según los forenses, el cuerpo de Santulli presentaba once heridas cortantes en el cuello, tórax, piernas y brazo izquierdo.

Los policías hallaron en la escena del crimen un cuchillo tipo Tramontina con el que, se sospecha, pudo haber sido cometido el asesinato.

Los investigadores intentan ahora determinar el móvil del crimen, pero no descartan que esté relacionado a cuestiones de pareja. Por eso, los pesquisas secuestraron una computadora portátil que el hombre tenía arriba de un escritorio y su teléfono celular, con intención de determinar las últimas comunicaciones que mantuvo y los mensajes recibidos y enviados.

Además, buscaban distintas cámaras de seguridad de la zona para intentar hallar si el hombre ingresó a su departamento con alguna persona.

En principio, la puerta de entrada al departamento no se hallaba violentada, por lo que se cree que el homicida ingresó con el consentimiento de la víctima.

Los investigadores intentaban determinar, además, si existe algún faltante de dinero. El hecho es investigado por personal de la comisaría 10a. y detectives de la División Homicidios de la Policía Federal, quienes trabajan bajo las órdenes del fiscal de instrucción porteño número 35, Ignacio Mahiques.