La Cámara Federal de Casación Penal debe resolver si sobresee o no al periodista Luis Ventura y a dos efectivos de la comisaría 17ma. de la Policía Federal por la difusión de fotos del cadáver de la modelo Jazmín De Grazia, muerta en febrero de 2012 en su departamento del barrio porteño de Recoleta.
Fuentes judiciales informaron que así lo resolvió la Sala IV de la Cámara Nacional en lo Criminal al conceder el recurso de casación que presentó la fiscalía contra el sobreseimiento dictado en octubre último por la misma sala.
Al conceder el recurso, la cuestión pasó al máximo tribunal penal del país que resolverá la situación procesal de Ventura y de las policías federales María Silvina García y Silvia Susana Bustamante.
En tanto, los camaristas de la Sala IV, Carlos González, Alberto Seijas y Mariano González Palazzo rechazaron los recursos de apelación de periodistas del diario Crónica, el matutino que publicó las fotos, sobre quienes sí confirmó sus procesamientos por “encubrimiento calificado con fines de lucro”.
En aquella oportunidad, los camaristas Seijas y González Palazzo consideraron que Ventura virtualmente se había autoincriminado al declarar como testigo y que luego esa prueba fue utilizada inválidamente para imputarle el delito de “encubrimiento” y dictar su procesamiento.
Los jueces rechazaron que la difusión de las fotos de De Grazia muerta en el interior del baño de su casa pueda encuadrarse en el “amplio derecho de la libertad de expresión” ya que “sostener una óptica diferente implica desnaturalizar el derecho a informar”.
“No se trata entonces de afectar arbitrariamente la actividad periodística sino de establecer razonables límites que no pueden soslayar la responsabilidad consecuente por el acto realizado”, dijeron los magistrados, quienes evaluaron que “el ejercicio de ese derecho se fundó en la comisión de delito y con el único propósito de generar rédito económico”.
En la misma resolución, los camaristas sobreseyeron a dos policías federales acusados de vender las fotos por considerar que si bien “existió una sustracción reprochable” del material no se pudo determinar quién la efectuó ya que “no existe prueba directa que permita establecer en qué momento desaparecieron las fotografías ni menos aún a manos de quién”.
En cambio, en mayo último, el juez de Instrucción Juan Ramos Padilla había dictado el procesamiento con embargos de hasta 1.000.000 de pesos de los dos efectivos y de siete periodistas, Ventura y los de Crónica.
Para el juez, los policías “aprovecharon sus cargos y funciones” para sustraer las fotos de la modelo muerta en su departamento, para venderlas “a cambio de un importante dinerario, que según consta de las pruebas analizadas rondaría la suma de 20.000 pesos”.
El magistrado afirmó que los periodistas sabían que las fotos habían sido sustraídas y que participaron en la adquisición de éstas “con ánimo de lucro”.
Ramos Padilla evaluó que “no se difundieron imágenes que podrían denominarse comunes sino, por el contrario, se publicaron fotografías que podrían ser consideradas morbosas, de mal gusto, repudiables, innecesarias”.
Esas fotos, publicadas en la tapa interior del diario Crónica en la edición del 10 de febrero de 2010, poco después de la muerte de la modelo, “claramente afectaron el ámbito privado e íntimo al no respetarse a la víctima ni a su familia, máxime cuando el hecho ocurrió en el interior de su vivienda particular”, consideró el magistrado.
De Grazia (27) fue encontrada muerta el 5 de febrero de 2012, en su departamento situado en Las Heras 1703 de Recoleta, donde vivía sola.
El cuerpo fue hallado en la bañera y la autopsia determinó luego que había muerto ahogada.
