Los siguientes son los datos personales y antecedentes penales de los cinco presos que hoy permanecían prófugos luego de haber escapado anteanoche de la comisaría de la localidad bonaerense de William Morris, partido de Hurlingham, tras cavar un pozo en la celda en la que estaban alojados, cuatro de ellos presos por robos y el otro por homicidio:
Nicolás Matías Corvi (34), domiciliado en dicho partido de la zona oeste del conurbano, estaba detenido desde el 6 de noviembre de este año en una causa por “robo agravado por escalamiento”.
José Mario Oregioni Zárate (30), con domicilio en William Morris, estaba preso desde el 20 del mes pasado por “robo agravado por el uso de arma de fuego”.
Javier Orlando Acuña (39), domiciliado en la vecina localidad de Villa Tesei, estaba detenido desde el 4 también de noviembre por “robo agravado por el uso de arma de fuego”.
Sebastián Nahuel González (27), con domicilio en Hurlingham, se encontraba preso desde el 29 del mencionado mes por “robo calificado en poblado y en banda”.
Y Marcelo Gabriel Robledo (38), domiciliado en el partido de Moreno, estaba detenido desde el 14 de octubre último por “homicidio simple con arma de fuego”.
Fuentes judiciales informaron que hasta anoche los cincos acusados permanecían prófugos y que todos los policías que estaban de servicio en la seccional situada en Potosí 3490 de William Morris fueron desafectados de sus funciones mientras se investiga si tuvieron alguna responsabilidad en la fuga registrada la noche del martes.
Los mismos voceros precisaron que ninguno de dichos efectivos declaró aún ante el fiscal de la causa, Mario Ferrario, de la Unidad Funcional de Instrucción (UFI) 3 del Departamento Judicial Morón, quien todavía no definió si los va a imputar y, en caso de que lo haga, por qué delito.
Para los pesquisas judiciales, la fuga fue el resultado de un trabajo “de varios días”, por lo que les llama la atención que los policías aparentemente no hayan advertido la maniobra durante ese período, dijeron los informantes.
“Cavaron un pozo que tiene dos metros desde el orificio de entrada al de salida”, describió una fuente con acceso al expediente.
El mismo vocero añadió que luego de haber salido de la celda por ese pozo -el cual habían disimulado tapándolo con un mueble- llegaron al sector del patio, donde saltaron una pared y ganaron la calle.
