Layla Sainz Fernandez había sido vista por última vez el jueves 22 de octubre cuando regresaba a su casa luego de la salida de la Escuela Normal Superior N° 4 de Caballito, donde cursaba el primer año del secundario.
A partir del miércoles 28 de noviembre la justicia ordenó a la división Cibercrimen de la Policía Metropolitana sumarse a la causa y que inicie una serie de tareas investigativas para determinar el paradero de la adolescente.
El jueves pasado, a partir del trabajo de campo realizado por la policía, la justicia ordenó realizar una serie de allanamientos en varios domicilios de “Ciudad Oculta”, ubicado en el barrio de Villa Lugano. En esa oportunidad, no se encontró a la menor pero el área de Criminalistica llevó a cabo exhaustivas pericias con el fin de recabar pruebas para determinar el posible paso de Layla por el lugar.
Luego, a raíz de nuevas tareas investigativas y con el trabajo de entrecruzamiento de datos, el viernes 30 se realizaron nuevos procedimientos en el barrio de Once y la Villa 20 de Barracas.
Finalmente, este lunes a las 7.30 de la mañana la menor se comunicó con su casa y habló con su madre. Sus padres, inmediatamente, dieron aviso a la Policía Metropolitana.
La llamada había sido realizada desde un locutorio a través del sistema de cobro revertido. Luego, se identificó el local y se observaron las cámaras de seguridad privadas y del Centro de Monitoreo Urbano de la Metropolitana que permitieron determinar la dirección hacia donde se había dirigido la menor.
Poco después, la división Cibercrimen puso en marcha un protocolo de emergencia y realizó un operativo de saturación de efectivos en la zona.
Los oficiales preguntaron, con una foto de Layla en la mano, casa por casa y a los vecinos que transitaban en la calle si habían visto a la menor. Alrededor de las 11.20 una persona indicó que le pareció haberla visto en la “Plaza del Ángel Gris”, ubicada en la calle Avellaneda y Donato Álvarez, en el barrio de Flores.
Inmediatamente, una brigada la encontró en el interior de la plaza y junto a un equipo interdisciplinario contuvieron a la menor. Luego, fue trasladada a la Fiscalía Descentralizada de Pompeya, en Almafuerte 37, donde fue revisada por un médico forense y entrevistada en una Cámara Gesell.
