La Policía Bonaerense logró hallar a Mia, la niña desaparecida desde el lunes de El Palomar, a causa del dato que entregó un malatero, Raúl Gonzalez, que pudo reconcer a la niña de seis años y alertó al 911. Gracias a esa alerta un agente pudo demorar primero y detener después a
Al ser increpado por el agente, Alcaraz afirmó ser el padre de la chica, sin embargo su actitud, y semejanza con la foto, hizo sospechar al oficial que lo detuvo a tres cuadras de la Estación de Omnibus.
Fuentes policiales señalaron a Online911 que Alcaraz fue visto por última vez el lunes cuando le pidió a un amigo 300 pesos, ahora los investigadores especulan que era dinero para los pasajes a Junin. Agregaron que “el carnicero” durante estos días había apagado su telefóno por lo que fue difícil su rastreo.
La Justicia asimismo se dispone a realizar un chequeo médico a Mia y luego seguramente se le tomará, a través de la cámara gesell, testimonio para saber de sus últimos días pero principalmente si puede surgir algún dato del crimen de su madre y su hermano de sólo tres años.
El problema que afrontan los investigadores un gran dilema encontrar las pruebas que vinculen a Alcaraz con el crimen y para eso Mia es fundamental para avanzar el la causa.
Según comentaron Alcaraz, con sus estados mentales altedados, tuvo un pasado complicado ya que pasó la mayor parte de su infancia en institutos de menores. “Nunca conoció a su padre y de hecho mentía sobre su verdadera identidad”, comentó uno de los investigadores quien afirmó que “Alcaraz creía que era el padre de Mia”. Además, algunas fuentes aseguran que estuvo en un fundación dirigida por el cura César Grassi.
El doble crimen ocurrió durante la madrugada del lunes último cuando Sabrina y sus hijos Ian y Mía se hallaban en su casa de la calle Murillo 484, en la localidad bonaerense de El Palomar, de Morón. Según determinaron los peritajes, la madre y su hijo Ian fueron abordadas mientras dormían y el homicida asesinó al niño de 19 puñaladas y a Sabrina de 9.
Los pesquisas establecieron que la madre llegó a levantarse tras las primeras puñaladas, tenía como lesión principal un corte en el cuello y luego recibió tres puntazos por la espalda, cuando ya estaba caída al lado de una cama.
Los forenses de la Policía Científica de Morón determinaron que el asesino utilizó un cuchillo de mesa con borde aserrado, el cual no fue hallado en la escena del doble crimen.
