La justicia española pidió que el padre del astro argentino Lionel Messi sea condenado a un año y seis meses de prisión por evadir impuestos por un valor cercano a los 4,1 millones de euros.
Jorge Messi asumió la responsabilidad e hizo una devolución de la presunta suma evadida, más intereses, por lo que la cifra final fue superior a los 5 millones.
A raíz de lo expuesto por el padre del capitán de la selección argentina de fútbol, el ministerio público exculpó a Messi del fraude fiscal de que le acusó inicialmente, pese a que la Audiencia de Barcelona lo mantuvo imputado.
Uno de los fundamentos que exponen los fiscales entre Messi y su hijo, para no incriminar a este último, es que el padre era el encargado de manejar los intereses económicos del jugador y llevaba el control de sus impuestos.
“No resulta acreditado que su desconocimiento fuese intencionado para defraudar a Hacienda”, indicó la Fiscalía y al mismo tiempo dispuso que “Leo” actúe como testigo en el juicio.