Lo arrestan por el abuso de dos nenas y queda libre a las 48 horas

    1169
    Ilustración.

    En la ciudad chubutense de Comodoro Rivadavia hay indignación. Es que un hombre acusado de abusar sexualmente de dos nenas de 3 y 5 años fue detenido el martes y a las 48 horas quedó en libertad. Pese a los informes de los médicos que daban por probadas las violaciones, una jueza decidió no dictarle la prisión preventiva por considerar que no existe peligro de fuga. Eso sí: le prohibió acercarse y tener contacto con las pequeñas víctimas.

    Tras la detención del sospechoso, identificado por el Diario Patagónico como Osvaldo Eduardo Rolón, la Policía realizó un allanamiento en su casa. Encontró prendas íntimas de las nenas y de mujeres adultas y también material pornográfico. Lo curioso fue que lo detuvieron por casualidad.

    Según publica el diario Clarín, Rolón concurrió el martes a la Seccional Quinta para hacer un trámite administrativo y ahí mismo quedó detenido por la causa que lo investiga por la violación de dos vecinitas suyas. Según la denuncia, la madre de la nena de 3 años había sorprendido al hombre cuando estaba con los pantalones bajos y tenía a la criatura semidesnuda y boca abajo sobre una cama. La mujer señaló a la Policía que ella atinó a atacarlo con un cuchillo, para luego rescatar a la nena y dirigirse a la comisaría.

    Según se desprendió luego de los informes médicos y de una entrevista con la pequeña víctima, el hombre le habría manoseado las partes íntimas. Por una situación similar atravesó la prima de la nena, de 5 años, de quien habría abusado en reiteradas ocasiones.

    Al vivir en casas cercanas, y aprovechando la situación de confianza entre vecinos, Rolón habría engañado a las víctimas ofreciéndoles caramelos. Así habría logrado que ingresaran a su habitación. Luego, las habría hecho desnudarse para tocarlas.

    La fiscal Lorena Gárate solicitó que Rolón fuera imputado por “abuso sexual gravemente ultrajante”. Como este delito prevé una pena de entre 6 y 15 años de cárcel, solicitó que le dictaran la prisión preventiva.

    Sin embargo la jueza Gladys Olavarría –la misma que días antes había ordenado la detención de Rolón– hizo lugar a un pedido de la defensora oficial Cristina Sadino, quien objetó la calificación escogida por la Fiscalía. Según la abogada, lo único que había ocurrido eran “tocamientos” que debían encuadrarse como “abusos simples”.

    Este delito prevé una pena de 3 años de prisión como máximo. En ese sentido, la defensora argumentó que esto hacía desaparecer el peligro de fuga. La jueza le dio la razón y, mientras se lo investiga, el hombre quedó libre y el jueves volvió al barrio de las víctimas.