Efectivos de la Policía Federal secuestró de una avioneta 456 kilos de marihuana que provenía del Paraguay y utilizaba campos en Argentina para arrojarla desde aeronaves. Como resultado, detuvimos a cinco integrantes de la banda
La ministra Patricia Bullrich, acompañada por el secretario de Seguridad Interior, Gerardo Milman; el jefe de la Policía Federal, Néstor Roncaglia, y el subsecretario de Lucha Contra el Narcotráfico, Martín Verrier, brindó una conferencia de prensa para detallar sobre la Operación Skyfall.
La funcionaria, se refirió al envío de droga por avión y a la importancia de la detección de dicha metodología por parte de los efectivos de la Policía Federal, afirmando que “es producto de la cantidad de controles que se realizan en las rutas argentinas”.
Acerca del modus operandi, denominado de “bombardeo”, la titular de la cartera de Seguridad indicó que anteriormente, en ese tipo de casos, la droga arrojada solía ser cocaína y no marihuana, y afirmó que es una consecuencia a “la fuerte presencia de los efectivos de la fuerzas federales”.
La investigación comenzó en abril de este año, cuando los efectivos de la Superintendencia del Interior y Delitos Federales Complejos de la PFA detectaron a una banda criminal que se dedicaba al narcomenudeo en la provincia de Santiago del Estero. A partir de este indicio y mediante técnicas de inteligencia criminal se pudo establecer que la misma tenía vínculos con un proveedor de marihuana oriundo de Paraguay, hecho que derivó en una causa aún mayor al tratarse de actividades de narcotráfico trasnacionales.
Además, se identificó a un ciudadano de la localidad santiagueña de Añatuya, el cual hacía las veces de intermediario ofreciendo campos aptos para el aterrizaje de aeronaves o el bombardeo de la droga desde el aire.
Las averiguaciones permitieron saber sobre distintas fechas programadas de vuelos desde la República de Paraguay, por lo que se desplegaron efectivos en las zonas aledañas a la espera de las operaciones, las cuales finalmente fueron suspendidas a último momento por parte de los sospechosos.
“Estamos firmando con la ANAC (Administración Nacional de Aviación Civil) un convenio para que todos los vuelos tengan plan de vuelo”, anticipó la funcionaria, acerca de la problemática de los vuelos irregulares. “Habrá una autoridad de aplicación, que sancionará y multará cuando haya un vuelo que no esté regularizado”, añadió la ministra Bullrich.
El decomiso de 456 kilos de marihuana se dio como resultado de uno de estos vuelos programados. La Policía Federal dispuso de múltiples vehículos para la Operación Skyfall, aguardando el arribo de la droga. En horas de la mañana se detectó una camioneta junto con otro auto, ambos previamente identificados, que llegaron al campo mencionado.
Al detener a ambos vehículos, se hallaron los 456 kilos de marihuana en bolsas de arpillera y se logró aprehender a tres hombres argentinos mayores de edad y a un cuarto de origen paraguayo.
Por su parte, el jefe de la Policía Federal , Néstor Roncaglia, destacó la labor de los miembros de la fuerza de seguridad y dijo que “los efectivos detectaron la ubicación del campo donde iban a arrojar el cargamento, a través de modernas técnicas de investigación”. Luego, brindó detalles del procedimiento, añadiendo que “la avioneta, sin detenerse, arrojó los once bultos en un campo y los miembros de la organización fueron a recogerlos, siendo detenidos por la Policía Federal”.
Los posteriores allanamientos realizados para lograr desarticular a la operación de raíz derivaron en la detención del quinto integrante, un argentino de 29 años, junto con el secuestro de una balanza, 3 celulares, dinero en efectivo, 1 pistola calibre 45, un cargador con municiones y un auto.
En conclusión, la banda criminal traficaba marihuana traída del Paraguay mediante avionetas y era distribuida en el Gran Buenos Aires y otros puntos del país. Todo esto se consumaba mediante vínculos de ciudadanos argentinos y paraguayos conformando así una organización trasnacional con colaboración de pequeños ruralistas que ofrecían las pistas clandestinas en territorio argentino y brindaban las coordenadas de los lugares de aterrizaje estratégicos en Santiago del Estero y Santa Fe.
Asimismo, la logística se ampliaba con vehículos de carga para trasladar la droga una vez que la misma era arrojada desde el aire por las avionetas narco. Con respecto al vínculo entre ambos países, también se identificaron giros de dinero de Argentina a Paraguay y viceversa y se individualizó al líder de la banda, un ciudadano paraguayo que no reside en nuestro país.
La causa está en manos del Juzgado Federal N° 1 de Santiago del Estero, a cargo del Dr. Guillermo Daniel Molinari, Secretaría del Dr. Marcelo Ferrero y Fiscalía del Dr. Pedro Eugenio Simón.
