Un ex asesor de la Aduana y dos revendedores de celulares Iphone fueron detenidos acusados por contrabando, en el marco de una causa que investiga el Juzgado Nacional en lo Penal Económico N°2.
Felipe Viramonte Noguer está acusado por el delito de “asociación ilícita” y es uno de los integrantes de la agrupación vecinal ConVocación por San Isidro. Fue candidato a concejal en las últimas elecciones.
Según fuentes judiciales, en la causa ya hay más de 30 imputados y existen escuchas de la investigación desde el 2017.
La investigación se inició a partir de una denuncia por presunto origen ilícito de los celulares producto del contrabando. Pero con el correr de la investigación comprobaron, además, que el pago con criptomonedas era para lavar dinero en negro. Y no sólo eso: también contaban con protección de funcionarios aduaneros.
En diciembre de 2020, Santiago Vergara Rossi, Jefe (Int) del Departamento de Inspecciones Generales de la Aduana, presentó una denuncia penal contra Manuel y Lucas Olivas (padre e hijo). Apuntaba a la comercialización de mercadería de origen extranjero de posible ingreso ilegal al territorio argentino.
El servicio aduanero concluyó que, “por el tipo de mercadería, las cantidades observadas, la vía de comercialización y la probable ausencia de autorización y/o licencia marcaria, harían presumir el ingreso irregular de la mercadería al territorio aduanero argentino”.
Cuando intervinieron los teléfonos celulares, accedieron a comunicaciones que mantuvieron con Felipe Noguer Viramonte. La investigación judicial añade que dicho funcionario “se encuentra mencionado en diversos artículos periodísticos de distintos portales digitales de noticias, encontrándose dichos artículos relacionados a irregularidades dentro de la AFIP, más precisamente a la división de Aduana de dicho organismo federal”.
En ellos, se hace mención de que Viramonte Noguer cumpliría el rol de asesor personal del ex director de Aduanas Diego Dávila, quien fuera titular de dicho organismo entre los años 2018 y 2019, y que fue fundamental su intervención para detener o postergar expedientes con multas por cifras millonarias, todos relacionados a evasión impositiva, y todo ello en perjuicio del Estado Nacional.
A su vez, se hace referencia tanto al incremento desproporcional del patrimonio del intervenido, que no correspondería con su respectivo sueldo, como también al hecho de que contara con un teléfono encriptado, que fuese provisto por la Agencia Federal de Inteligencia (AFI) durante la presidencia del ex mandatario Mauricio Macri.
Viramonte Noguer entró a la Aduana de la mano del entonces director Diego Dávila, con un sueldo de alrededor de 50.000 pesos, y a los pocos meses se había comprado un automóvil valuado en $ 450.000, un Volkswagen Golf TSI. Venía de trabajar en un estudio jurídico que justamente litigaba contra la Aduana. Se trata de Pettersen Cotter Moine, que en la Anses figura como su empleador desde el 2012 hasta el 2016.
